Esta vez, en la que fue su primera entrevista como candidata a una mujer conductora, Cristina Kirchner se animó hoy a un descontracturado mano a mano con Elizabeth “la Negra” Vernaci desde los estudios de Radio con Vos.
Se trató de un diálogo distendido, risueño por momentos, con anécdotas varias, algunos puntos picantes y hasta revelaciones vinculadas con lo que fue su relación con Néstor Kirchner y sus gustos personales.
Entre otras cuestiones, la ex presidenta dijo: “Me han agredido mucho y creo que hay una cuestión de género”. Asimismo, comparó la “herencia” y aseguró que durante su gestión hubo intentos destituyentes muy claros. “Me levantaba todos los días pensando qué me iban a hacer, qué iban a decir de mi”.
Asimismo, aclaró que “sólo pongo las manos en el fuego por mi familia”, en referencia a los casos de corrupción que involucran a ex funcionarios de su gestión.
“Fuimos el gobierno que desendeudó el país. Esa sí que fue la pesada herencia. La gente tenía trabajo, los salarios por encima de la inflación. Ponete a pensar cómo vivía la gente hasta diciembre del 2015 y cómo están ahora”, destacando que “los discapacitados tenían atención, los jubilados tenían cobertura, no había persecución”, mientras que “el actual gobierno se endeudó en 100 mil millones y no hicieron nada”.
La conductora la recibió con el tema “Avanti, Morocha” de ‘Los caballeros de la quema’, uno de los predilectos de la ex presidenta. Y, como era de esperarse, fue Cristina quien tiró el primer centro al quejarse por los auriculares: “Me ponen tantas cosas en la cabeza”.
Mientras, Vernaci abordó la cuestión del paso de los años. “La edad es una mierda”, disparó. “Todo tiene su encanto”, resistió Cristina. “¿Vos te sentías mejor en otras edades?”, preguntó. “Me sentí mejor entre los cuarenta y los cincuenta. Esa fue la década nuestra”.
Algunas de las cuestiones que aparecieron durante la entrevista:
“Néstor siempre me cargaba. Cuando él empezó a estar más tiempo en Buenos Aires, de pronto yo me estaba arreglando y me decía: ‘Mientras vos te pintabas yo subía, iba para tal parte, para tal otra’. Me boludeaba. Algunos han presenciado la boludeada. Un poquito me hinchaba, pero yo me reía. Después lo agarraba y le decía: ‘Dejame de joder’”.
“Yo me paraba frente al espejo de agua tradicional de la Quinta de Olivos y difónica decía: ‘Sí, estamos en Olivos’. No tenía voz. Me hicieron mediciones y estaba perfecta. Hasta que bajó el nivel de estrés y volví con mi voz. Me pasaba lo mismo cuando iba a rendir examen, siempre llegaba difónica”.
“Estudiaba las materias leyendo. Era re traga, insoportable. Era la que más sabía, la que quería taparle la boca a todos. Insoportable”. En cambio “Néstor estudiaba lo justo para zafar. Se iba sin bolillas aprendidas”.
“Siempre nos peleábamos. Antes de ser presidentes y después. Él siempre me decía una cosa que es el piropo más grande que me dijo en mi vida: ‘De lo único que nunca me aburrí en mi vida es de vos’. El tipo me hacía el bocho”.
“Detestábamos a esas parejas que andan tocándose la manito, me embolan. No me gustan”.
“No éramos mimosos ninguno de los dos. Lo demostrábamos (el amor) queriendo estar siempre juntos”.
“Me molesta que la gente me anda manoteando. Siempre digo: ‘No me toques que no soy guitarra’”.
“No era de sentarme a upa de Néstor, él me hubiera sacado. Éramos de ver televisión juntos. Almorzábamos y cenábamos juntos, siempre”.
“Mi papá odiaba a los negros y a los sindicatos. Cuando vino Néstor a casa, él andaba con una campera verde y el pelo re largo, además de anteojos, onda Mayo Francés. Cuando papá lo vio, que era re gorila, se quería morir. Yo tenía 20 cuando lo llevé. Estuvimos muy poco tiempo de novios, seis meses nada más”.
“Mi papá cuando lo vio (a Néstor), a mí no me dijo nada. Pero a mi mamá le dijo: ‘Parece un guerrillero que bajó del monte’”.
En otro momento, la “Negra” le preguntó: “¿Vos te robaste todo?”, Tranquila, Cristina retrucó: “Al contrario, fuimos al Gobierno que más desendeudó al país. Cuando Néstor llegó, este país debía el 150 por ciento del PBI. Reestructuró la deuda, pagamos lo que recibimos; esa sí que fue una pesada herencia”.
Otro momento duro fue cuando la conductora le preguntó por la millonaria pauta que su administración le dio a Sergio Szpolsky y a Matías Garfunkel. “Nos dejaron en pelotas al darle la pauta a los nefastos de Szpolsky y Garfunkel. ¿Ustedes se enteraron de lo que hacían?”, disparó Vernaci, quien perdió su histórico espacio en la Rock & Pop a finales de 2013 tras la compra de la emisoria por parte de los empresarios vinculados al kirchnerismo.
La respuesta de la ex presidenta: “No. La pauta era para una cantidad inmensa de medios para todo el país. Era imposible saberlo y uno no puede hacerse responsable de lo que pueden hacer otros. Nosotros no teníamos conocimiento, el problema vino después de que nos fuimos. Durante nuestra gestión, los trabajadores cobraban los salarios. La asignación de pauta era controlada por la oposición. No creo que sean los que más recibieron”.