En los últimos días, el ex ministro de Interior y Transporte, Florencio Randazzo, aparece mencionado en las reuniones de la mesa chica de Cambiemos como un futuro candidato que rompa el peronismo en la provincia de Buenos Aires. Como hemos informado en Info135 hay preocupación en el presidente Macri y su mesa chica por el 48 por ciento de imagen positiva de la ex presidenta Cristina Kirchner. La segunda preocupación es que el peronismo se mantiene unido y desde el gobierno nacional lo necesitan dividido para mejorar la performance de Cambiemos en la provincia, que hoy por hoy están terceros.
En las últimas horas, la revista Noticias publicó declaraciones de Randazzo a sobre Cristina, Scioli y Cambiemos. Según el diario, Randazzo cuando está “entrado en copas” dice toda la verdad. En primer lugar, asegura que no se va a sumar al macrismo: “No me voy a hacer puto de grande. ¿Qué tengo que ver con el PRO? Yo soy peronista, tengo una conducta, no soy un saltimbanqui. ¡Monzó no me va a decir a mí adónde tengo que ir! Ni en pedo, que no me jodan”.
En esas charlas, entrado en copas, le gusta cuestionar a Cristina y a Daniel Scioli. “El peronismo alimenta chantas, como al chanta de Scioli. ¡Yo se lo decía a ella! Es un chanta, es la antipolítica. Es un tipo que no tiene límites, que no hizo nada en la provincia. Es una mentira. Yo con la gente así no tengo nada que ver. Por eso cuando ella no me dejó ir a la primaria yo me fui. ¡Y ella de Scioli pensaba peor que lo que pienso yo! ‘Conseguite un candidato’, le dije. Que se vayan a cagar, yo me voy a mi casa”., dijo.
Quienes conversaron con la ex presidenta o alguno de sus ministros de aquel entonces dicen otra cosa. Cristina le ofreció una fórmula con Axel Kicillof o que fuera único candidato a gobernador por la provincia de Buenos Aires. Rechazo ambas propuestas porque no quería ir a una interna con Scioli. Las encuestas de aquel momento lo daban perdedor ante el gobernador bonaerense.
Algo que le pasa hoy también. Según varias encuestas, si enfrentara a Cristina en una interna perdería 38 a 8 y en caso que enfrentar a Scioli perdería 29 a 11. Cifras contundentes. La realidad es que el ex ministro no midió ni mide hoy en día, de allí que varios intendentes del Grupo Esmeralda que confiaban en llevarlo de candidato a una interna, empiezan a reconocer que prefieren a la ex presidenta que mide entre 33 y 38 puntos en la provincia y cerca del 50 en el conurbano.