Un informe realizado por la Secretaría de Producción de La Matanza muestra que el desempleo en ese distrito creció un 28% en los últimos tres meses, como consecuencia de las políticas económicas aplicadas por el gobierno de Mauricio Macri en Nación y de María Eugenia Vidal en la provincia. Los números de la crisis en el distrito más populoso del país y de mayor importancia electoral son escalofriantes.
Según el relevamiento de la cartera que conduce Débora Giorgi, entre el último trimestre de 2016 y el primer trimestre de 2017, el desempleo aumentó un 28 por ciento, lo que implica que unos 25 mil matanceros están buscando y no consiguen trabajo. Hoy son 114.381 los trabajadores oriundos del Partido que actualmente se encuentran desempleados, mientras que a fines del año pasado, ese número se ubicaba en 89.500.
El incremento acompaña la suba de la desocupación registrada en el Conurbano, donde la caída en los sectores productivos tiene un mayor impacto. La semana pasada, el INDEC informó que la desocupación en el Área Metropolitana de Buenos Aires trepó por encima de los dos dígitos y se ubicó en 11,8 por ciento, representando el aumento más importante del país.
Frente al magro panorama, los comerciantes siguen sin poder recuperarse y las ventas en el municipio volvieron a registrar una bruta caída: cayeron un 37 por ciento. El sondeo realizado por la Secretaría de Producción entre abril y mayo, indica que los rubros más afectados fueron Mueblería (-47%), Bazar (-40%), Calzados (-39), Carnicería (-38%) y Gastronomía (-38%), que se ubicaron por abajo del promedio general.
Medido por localidades, las localidades más afectadas por la baja de ventas fueron Rafael Castillo (-52%), Ciudad Evita (-50%), Villa Celina (-41%), Laferrere (-40%) y Aldo Bonzi (-38).
En tanto, las localidades menos afectadas fueron Isidro Casanova (-28%), Tapiales (-29%), San Justo (-29%), Lomas del Millón (-30%) y Villa Luzuriaga (-31%). Consultados por los motivos de la retracción en las ventas, los comerciantes matanceros estimaron en un 84 por ciento que la baja se debe a una caída de poder adquisitivo de los salarios, mientras que el 15 por ciento estimó que se debe a una mayor competencia.
El documento desnuda cómo golpea la política económica de Macri y Vidal en el territorio más poblado de todo el país. Así los números son escalofriantes. Aquí parte del informe:
La pobreza monetaria -o por ingresos- alcanza a aquellas personas que habitan en hogares cuyos ingresos totales son insuficientes para adquirir un conjunto de alimentos y servicios básicos (pobreza) o bien sólo los alimentos (pobreza extrema o indigencia).
Actualmente, la población total que reside en el Conurbano Bonaerense es de poco más 11.800.000 de personas. Aproximadamente cuatro millones de esas personas son pobres, es decir, residen en hogares cuyos ingresos totales no alcanzan a cubrir los alimentos y servicios básicos para la reproducción cotidiana. Esta población, que puede ser clasificada como “pobre”, equivale a un 34,1% de la población total del Conurbano . (Ver indicador)
Los niveles de pobreza se concentran con mayor intensidad en ciertos grupos poblacionales específicos. En primer lugar, y como puede observarse en el siguiente gráfico, los niños, niñas y adolescentes menores de 18 años poseen una incidencia de la pobreza significativamente más elevada que el promedio de la población y que el resto de grupos etarios considerados. De hecho, casi la mitad de este segmento poblacional se encuentra bajo la línea de pobreza (49,6%), representando a 1.662.055 de niños, niñas y adolescentes.