Los intendentes del FpV denunciaron esta semana que Cambiemos “usa el látigo de manera escandalosa” y los datos oficiales les dan la razón. Mientras el gobierno nacional le dio este año un total de $2.590 millones al intendente oficialista de Quilmes, Martiniano Molina, para gestionar, a su par de Moreno, distrito conducido por el peronista Walter Festa, sólo le tocarán $173 millones.
Los datos surgen de un informe del Centro de Estudios Metropolitanos (CEM) en base al análisis del presupuesto aprobado 2017. En el caso de Molina, los $2.590 millones de origen nacional que recibió significan el 40% del dinero total que Quilmes planea gastar en todo el año. Cada uno de los 580.829 quilmeños recibirá de Nación a través del municipio $4459, mientras que cada moronense vale $335 para el oficialismo.
La discrecionalidad del macrismo para repartir fondos se agrava más si se tiene en cuenta que el uso de los fondos en el caso de Quilmes no se traduce en obras, ya que la municipalidad tiene altos índices de subejecución. El informe oficial 2016 de la situación económica y financiera de Quilmes publicado en la web del municipio revela que Molina subejecutó el 50% de su presupuesto para el año pasado.
El informe oficial revela que en el ítem Bienes de uso, sobre realización de obras y adquisición de maquinarias y equipos, sólo se ejecutaron 268 millones sobre los $3.684 millones destinados: es decir, un 7%. En tanto, en construcción de viviendas se ejecutó el 3%; en el “Programa Federal de Villas y Asentamientos” se usó el 2% del dinero; y en “Redes de Aguas, Cloacas y Saneamientos Hídricos” menos del 1%.
1 comentario