Cristina Fernández de Kirchner visitó un merendero en el barrio La Reja Grande del partido de Moreno, donde se reunió con representantes de comedores e instituciones sociales de la localidad y fue recibida por el Intendente Walter Festa, la candidata a diputada nacional Romina Uhrig y el candidato a diputado provincial, Marcos Di Palma.
“No puede ser que hayan convertido al Estado casi en una propiedad privada que beneficia a sus familiares, parientes, amigos y socios”, dijo y agregó que “hay que ponerle un límite y un freno a un gobierno que ha convertido al Estado casi en su empresa privada”.
La candidata de Unidad Ciudadana consideró que “la Argentina no puede ser la empresa privada de nadie. La Argentina tiene que volver a ser de todos los argentinos. Devuélvanle al pueblo la Argentina”.
También habló de los tarifazos de los servicios públicos y recordó que los empresarios que tienen las concesiones son “amigos del alma” de Macri. “Las tarifas de los servicios que siguen aumentando sin control. ¿Cómo las van a controlar si son sus amigos o sus parientes los dueños de las empresas eléctricas?”, sostuvo y completó: “Edenor y Edesur son de los amigos del alma del presidente, las tarifas se deciden ahí y nadie sabe cuál es hoy el precio adecuado de cada servicio porque no tiene lógica ni racionalidad”.
Por último y a horas de cumplirse dos meses de la desaparición del artesano Santiago Maldonado, Cristina dijo que “estamos exactamente igual que hace 60 días. La familia de Santiago Maldonado sigue sin saber de él. Vamos por el segundo juez de la causa y seguimos exactamente sin que nadie se haga cargo de nada”.
“Cuando desaparece un ciudadano que es un hecho muy grave y el estado reacciona encubriendo esa desaparición, ahí está la verdadera gravedad democrática”, agregó.