En un muy interesante trabajo del sociólogo Artemio López, la ex presidenta Cristina Kirchner ¡les hizo pito catalán! al establishment y saco una muy importante diferencia con los sectores peronistas no kirchneristas.
La nota completa de Artemio publicada en su blog (http://rambletamble.blogspot.com.ar):
“El clima de medios actual es sin duda el de mayor alineamiento con el oficialismo del que tengamos memoria en democracia. Los medios de mayor audiencia, con la excepción de Perfil que matiza sus miradas, el resto posee un sesgo pro ajuste tan marcado que desde el precio de tapa al último punto de la contratapa están signados por la complicidad abierta con el actual gobierno neoliberal.
El análisis de los resultados de las elecciones del 22 de Octubre también estuvo signado por el maridaje de la mayoría de los opinadores y analistas de medios y el oficialismo.
Intentaremos dar una visión alternativa de lo que supuso la elección de medio mandato, donde está claro se consolidaron dos fuerzas antagónicas, bajo dos nítidos liderazgo nacionales con un fuerte apoyo electoral a punto que entre ellos acapararon el 78% de os votos.
Nos referimos a Mauricio Macri y Cristina Kirchner. El gráfico muestra los resultados de la elección a nivel nacional según el notable agrupamiento realizado por el politólogo Andy Tow , muy profusamente comentado en las redes, donde se observa ordenado por alianzas que la agrupación Cambiemos , la única presente en los 24 distritos nacionales, gana la elección con el 41% de los votos efectivos e inmediatamente se ubica la alianza Unidad Ciudadana-FPV, espacio que lidera Cristina Kirchner a nivel nacional, que sumó el 36,6% de los votos efectivos nacionales.(*)
Esto implica que si se plantara un escenario de renovación presidencial habría ballotage y hoy sería entre Cristina Kirchner y Mauricio Macri.
El actual oficialismo, sostenido por el conjunto del poder financiero y parte del económico más poderoso, el conjunto del sistema de medios de mayor audiencia, el partido judicial que sin fisuras hace de chirolita del ejecutivo, sin embargo no logra construir una opción electoral que le dé chances de ganar una elección en primera vuelta. Preocupante para el establishment.
En segundo lugar, la tan fogoneada por el oficialismo – y el coro de medios afines – “interna” en el “pan peronismo” ha concluido y Cristina Kirchner logró una preponderancia que ni aún en los sueños del kirchnerista más furioso tenía lugar.
En efecto Cristina Kirchner disputó la provincia de Buenos Aires con un celular, porque la plata de la campaña se la llevó Randazzo al quedarse con la sigla PJ.
Así, con este nivel de austeridad y con un espacio fundado 90 días antes de la elección, CFK obtuvo en Buenos Aires 3.491.136 votos, el 37%, 360 mil votos detrás del Gobierno.
Logró 13 diputados nacionales, tres de extracción gremial restituyendo tras décadas el tradicional tercio asignado por el peronismo a los representantes de los trabajadores y ella será Senadora.
Su fuerza suma 30 diputados nacionales nuevos. Se enfrentó contra los dueños de éste país, contra el sistema financiero, judicial y mediático y les hizo pito catalán (¿suena antiguo?) .
Si sumáramos los votos de todos los “renovadores”, todos juntos suman 2.285.884 sufragios, UN MILLÓN DOS CIENTOS CINCO MIL votos menos que los que obtuviera Cristina en un solo distrito. Veamos:
- URTUBEY 162.940
- RANDAZZO 481.533
- SCHIARETTI 622.321
- MASSA 1.019.090
Adicionalmente debe observarse que Unidad Ciudadana ganó el Conurbano bonaerense, el principal aglomerado del país, tal como se observa en el gráfico.
En conclusión, tras las elecciones de medio término se afirman dos liderazgos nacionales excluyentes: El que encarna el actual presidente Mauricio Macri y la principal opositora, Cristina Kirchner que en apenas 90 días armó una opción electoral que en alianza con otras fuerzas afines al proyecto popular-democrático que encarna, es capaz de ser una alternativa exitosa de cara a futuros compromisos electorales.
(*) Resultados observados en los 8 distritos en que hubieron elecciones a Senador que representan el 50% del padrón ( 15.587.668 electores)