Buscando trabajo: Massa hará consultorías para el ex alcalde neoyorquino Rudolph Giuliani

A partir del 10 de diciembre, Sergio Massa dejará de ser diputado y, por lo tanto, ya empezó a evaluar su futuro inmediato que, por ahora, apuntaría a realizar trabajos de consultoría para el ex alcalde de Nueva York, Rudolph Giuliani.

Después de la pésima performance electoral el 22 de octubre junto a Margarita Stolbizer con el espacio 1País, Massa estará cada vez más alejado de las cuestiones políticas, aunque seguirá monitoreando la actividad de los escasos intendentes y legisladores que todavía le responden.

La relación con Giuliani -que puso en práctica la “tolerancia cero” para todos los delitos-, se remonta a varias años. Incluso, en el tramo final de la última campaña bonaerense, el ex alcalde neoyorquino lo respaldó abiertamente. Fue al presentar un informe sobre la inseguridad en la provincia de Buenos Aires, contratado por el Frente Renovador, que incluyó un capítulo con recomendaciones para los gobiernos locales.

Giuliani, al apoyar a Massa dijo que “el punto central de este estudio es que tenemos que lograr que Tigre sea un gran ejemplo para la lucha contra la inseguridad en la Argentina. Si se pudo lograr en Tigre, se puede lograr en todos lados”.

Quienes están cerca del ex intendente, dicen que por estos días repite que “hay que aprender a correrse, a dejar protagonismo a otros, y a jugar cuando corresponde”. Es que, aseguran, el magro resultado que logró en las últimas elecciones (11 %), lo golpeó con dureza.

Y él mismo contó a sus íntimos que el perfil bajo lo mantendrá al menos durante un año, calculando que, de acuerdo a los vaivenes de la política y de la realidad provincial y nacional, tal vez para fines de 2018 retorne a las filas del peronismo, con la idea de barajar y dar de nuevo…

Está claro que el massismo terminó de profundizar su crisis a partir de la pérdida de competitividad electoral en la que quedó sumergido después de los comicios del 22 de octubre. Antes de que transcurriera una semana, ya se escuchaban pases de factura.

Como ejemplo de la debilidad que sufre su espacio, de esas elecciones también surge que, por fuera de la pelea por el Senado, Massa alcanzó a colar la cuarta parte de los 16 diputados que metió en 2013 para el Congreso. El crudo panorama se ve en otras categorías: la batalla por la Primera sección, su histórica base, que incluyó la dura derrota en Tigre, es la que más lo expone: pasó de ingresar 5 senadores para la Legislatura en 2013, a ninguno en 2017.

Además, la estructura local desde la que Massa supo construir su liderazgo hace sólo cuatro años, quedó debilitada por las fugas, especialmente a Cambiemos, así como por el declive experimentado en los últimos dos comicios.