Mariana Triaca, hermana del ministro de Trabajo, Jorge Triaca, acaba de ser designada Directora del Banco de la Nación Argentina. Así se dispuso mediante los decretos 1004 y 1005, publicados hoy en el Boletín Oficial con las firmas del presidente Mauricio Macri y el ministro de Finanzas, Luis Caputo.
La mujer, de 40 años, se desempeñaba como asesora del Directorio del BNA. Allí había ingresado en agosto de 2016 y trabajaba para Alejandro Henke, a quien ahora reemplaza. Es contadora y estudió en la Universidad de El Salvador. Antes de entrar al Nación fue por 9 años gerente de Finanzas de la firma ‘See Cooperativa de Crédito y Vivienda’, según publica en su perfil en Internet. Y antes fue socia gerente de Villa Hípica.
No se trata de un caso aislado en el equipo del Gobierno de algún familiar del titular de la cartera laboral: María Cecilia Loccisano, esposa de Jorge Triaca, ocupa el cargo de coordinadora de la Unidad de Financiamiento Internacional en el Ministerio de Salud.
La designación de Mariana Triaca inevitablemente recuerda lo que fue el nombramiento de Delfina Rossi, hija del entonces ministro de Defensa, Agustín Rossi, en un puesto similar en agosto de 2015, y que tanto rechazo generó, sobre todo por parte de referentes del Pro, empezando por Mauricio Macri, quien opinó: “A los 26 años no podés ser directora del Banco Nación. Para eso la ponemos a Antonia con cinco años, y la nombramos en algún cargo”.
La gran diferencia entre la hermana de Triaca y la hija de Rossi, es el currículum. Delfina es licenciada en Economía, graduada en Barcelona y es Máster en Economía cursado en Florencia, Italia. También tiene un posgrado en Ciencia Política en la University of London & LSE y cursaba un Máster en Políticas Públicas en Austin, Texas.
Incluso, aquel nombramiento hasta generó una presentación judicial por parte del secretario de Organización Política de la Juventud del PRO, Yamil Santoro, aunque fue rechazada por el juez en lo Contencioso Administrativo Federal, Pablo Cayssials.
Sin embargo, desde que Cambiemos está en el poder, son numerosos los casos de familiares de funcionarios nombrados en cargos públicos, pero que ahora no generan repudio y se silencian. Entre las designaciones más emblemáticas está la de Carla Piccolomini, esposa del ministro de Modernización, Andrés Ibarra, que fue nombrada en el directorio de Radio y Televisión Argentina (RTA) como directora de Relaciones Institucionales.
El ministro de Cultura, Pablo Avelluto, llevó a su novia, Carolina Azzi, a trabajar al Ministerio. Y designó a Josefina Rouillet, esposa del titular del Banco Central, Federico Sturzenegger, como gerenta general del Fondo de las Artes.
Por su parte, Oscar Aguad nombró a Mario Frigerio, tío del ministro del Interior, como interventor de la AFTIC, y también designó a su yerno, Rodrigo de Loredo, como presidente de Arsat.
Por su parte, el ministro de Turismo, Gustavo Santos, nombró a su hijo, Matías Santos Crocsel, como jefe de asesores de gabinete en el Ministerio. Mientras que la prima de la vicepresidenta Gabriela Michetti, María Alejandra Illia, ascendió dos categorías consecutivas en el Senado de la Nación, aunque figura en la planta transitoria.