En la peor represión de las fuerzas de seguridad que se recuerde en la Argentina de los días tremendos del 20 y 21 de diciembre de 2001 que costó la vida de 40 personas, el presidente Mauricio Macri, reunido con parte de su gabinete, decidió que la reforma previsional salga por un DNU, una medida ilegal ante el Congreso nacional.
Al enterarse de esta medida, la diputada nacional sacó un duro tuit señalando que “su persona y la Coalición Cívica juraron respetar la Constitución Nacional y no la van a violar bajo ningún concepto. Un DNU violaría gravemente la Constitución Nacional”.
La violencia institucional pone en riesgo la democracia en la Argentina como sucedió a principio de su gobierno cuando quiso nombrar por decreto a dos integrantes de la Corte.
Un DNU sería tirar nafta al fuego, dicen desde la CC y también desde la oposición. El decreto ya se elaboró y falta que se haga público.
Ampliaremos