Mientras los trabajadores del Hospital Posadas, en Haedo, se concentran en la colectora del acceso Oeste, a metros del centro médico, decenas de efectivos de la Gendarmería impiden el avance de los manifestantes, que llevan adelante una medida de fuerza “en rechazo al despido de 122 personas”.
Esta mañana, los trabajadores intentaron subir a la autopista, a la altura del kilómetro 16, para interrumpir la circulación en sentido a Capital, lo que generó el arribo de más gendarmes al lugar.
Los trabajadores del hospital denuncian que no recibieron ningún telegrama formal de despido, y que varias áreas quedaron desarticuladas, impidiendo que los usuarios puedan acceder a esos servicios.
La concentración en la puerta del hospital comenzó a las 8. Allí se hicieron presentes trabajadores despedidos, pacientes y organizaciones sociales, destacándose la presencia de Nora Cortiñas, referente de Madres de Plaza Mayo.
Además de exigir la reincorporación de los empleados, el gremio que nuclea a los trabajadores de la salud, Cicop, reclamó “la falta de convocatoria a paritaria” por parte de la gobernadora María Eugenia Vidal, y advirtió que “los despidos en el hospital más grande de Argentina revisten una gravedad inusitada”.
La entidad gremial denunció “la afectación del servicio de salud” y “el deterioro del funcionamiento de áreas críticas que requieren de conocimiento y experiencia”, y dice que no se tiene en cuenta la “trayectoria” de los trabajadores “con años de tarea en ese lugar”, al tiempo que pide la “reincorporación de los despedidos”.