El presidente Mauricio Macri firmará la semana próxima por decreto un régimen de retiro voluntario para el personal de toda la Administración Pública Nacional con el objetivo de eliminar 5 mil cargos.
Los retiros voluntarios abarcarán a los empleados de los ministerios y los organismos descentralizados e instituciones de la seguridad social que engloban tanto al PAMI y la ANSES como a la AFIP, entre otros organismos públicos. La idea fue elaborada por los ministros de Modernización, Andrés Ibarra; de Hacienda, Nicolás Dujovne; y el ex titular de la AFIP, Alberto Abad y será oficializada la semana próxima en el Boletín Oficial.
El plan de retiros contemplará cuotas de 24 y 36 cuotas mensuales equivalentes al sueldo neto y el beneficio de la obra social para aquellos empleados de planta permanente y los que se rijan por la ley de contrato de trabajo que decidan irse del Estado. Se estima que el universo en condiciones de acogerse sería de 80.000, y podrían adherirse entre 3.000 y 5.000 empleados públicos, que no podrán ser reemplazados.
En el caso de los menores de 60 años, con más de dos años de trabajo, las cuotas serán del 70% del salario neto y crecientes según la antigüedad. Los empleados podrán reinsertarse en el sector privado y percibir un sueldo simultáneo al plan.
Se excluirá del régimen de retiro voluntario al personal de las Fuerzas Armadas en actividad o retirado, de las Fuerzas de Seguridad, de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), docentes, profesionales de la salud, servicio exterior o científico técnico.