El peronismo apeló el fallo político de la jueza María Servini de Cubría y encabezó un acto en la puerta de la sede de Matheu junto a dirigentes del peronismo que confirmaron el llamado a un congreso nacional para el 18 de mayo, órgano que tiene autonomía y no puede ser frenado por la jueza.
Antes del acto en la sede del partido, en las oficinas de la fundación de Julio Pereyra se reunieron una cantidad importante de dirigentes de todo el país. Hubo gobernadores, legisladores y representantes de las provincias. En la reunión se lo vio al presidente del PJ nacional José Luis Gioja, al vicepresidente Daniel Scioli, el gobernador Alberto Rodríguez Saá, Agustín Rossi, Pablo Moyano, Beatriz Rojkes de Alperovich, Víctor Santa María y Fernando Espinoza, entre otros.
Gioja afirmó que “quieren pasarse por el traste la soberanía popular que tiene que elegir el año que viene”. Luego sostuvo que “vamos a agotar todas la vías, pero no nos vamos a cruzar de brazos”. Finalmente, parafraseó a Nestor Kirchner y Lula y aseveró “podrán cortar una y mil rosas pero no van a poder parar la primavera”.
De la provincia de Buenos Aires se los vio muy activos al presidente del PJ bonaerense, Gustavo Menéndez, a los intendentes Leonardo Nardini, Verónica Magario, Mariano Cascallares y Fernando Grey, entre otros
“No van a poder con el partido que crearon Perón y Evita”, dijo el titular del PJ Bonaerense, Gustavo Menéndez. Luego evaluó que “en el peor momento del Presidente (Mauricio Macri), donde su gestión hace agua, donde su imagen ha caído, la respuesta es intentar con el aborto dividir al pueblo y ahora no se les ocurrió mejor idea de meterse con el partido. Aquí nadie baja los brazos, aquí nadie se entrega”.
Magario opinó que “este fallo es medio raro, este fallo tiene sabor a ser un fallo político sin argumento jurídico” y expresó que no se comprenden los argumentos de la Jueza en el marco de un partido que tiene representatividad en todas las provincias y en los municipios y “que eligió a sus autoridades en el 2016”.
En plena reunión de la dirigencia sucedió un hecho inesperado. Sonó el celular de Scioli y del otro lado del teléfono Eduardo Duhalde avisaba que “yo no tengo nada que ver con esto”, a lo que rápido de reflejos el ex gobernador le respondió: “Que oportuno tu llamado porque estoy acá con Gioja” y le pasó el teléfono, donde Duhalde volvió a repetir que no tenia nada que ver con la intervención.
Hasta el senador Miguel Ángel Pichetto, luego que todos los gobernadores salieron a apoyar a Gioja y para no quedar más comprometido con el gobierno nacional emitió un escueto comunicado cuestionando el fallo de la jueza.
Nadie quiere quedar pegado a los aprietes del gobierno nacional y la justicia adicta a Cambiemos, excepto Sergio Massa, Diego Bossio y Florencio Randazzo que prefirieron el silencio o quizás esperando a que los llame Luis Barrionuevo como prometió en el diario Clarín.
1 comentario
Está visto lejos lejos que es un favor que le hace a Cambiemos (cambiemos que….?) la Maria Romilda Inservible de Cubria