Marcos Peña: “No habrá marcha atrás” con los tarifazos, y calificó a Cristina de “irresponsable y demagoga”

“No habrá marcha atrás”. A pesar de los cuestionamientos desde todo el arco político, incluido el oficialismo y el creciente malhumor social, el jefe de Gabinete, Marcos Peña, dio por cerrada la posibilidad de que el Gobierno pueda revisar los brutales aumentos de tarifas  que se vienen registrando en los servicios públicos, y ratificó que, por lo tanto, continuará sin cambios la política en esa materia.

Además, con fuertes críticas a Cristina Kirchner, rechazó el proyecto de la senadora de Unidad Ciudadana para retrotraer las subas de tarifas en los servicios públicos. “Es una actitud demagógica e irresponsable”, dijo Peña sobre la iniciativa que proponía que las tarifas volvieran a los costos del 1° de enero de 2017.

“No nos sorprende, ya que (Cristina) no está en una actitud constructiva”, afirmó. Así, desestimó la iniciativa que plantea la suspensión por dos años de las subas de tarifas de los servicios públicos de electricidad, gas por redes y agua corriente.

“Se trata de actitud demagógica e irresponsable de quienes quebraron el sistema económico y energético del país, como la ex presidenta, y no nos sorprende que nos critiquen”, dijo el funcionario durante un encuentro con periodistas al término de la reunión de gabinete encabezada por Mauricio Macri en la Casa Rosada.

En tanto, diferenció el pedido de la diputada oficialista Elisa Carrió, quien planteó un pedido de informes en el Congreso sobre los aumentos, y prometió que le enviará información. “Las discusiones que tenemos dentro de Cambiemos entran dentro de otro contexto de responsabilidad y de diálogo”, sostuvo Peña.

Por otra parte, dijo que “creemos que estamos haciendo un combate efectivo a la inflación, y eso se va a notar cada vez más. Hoy los más pesimistas están hablando de un porcentaje más bajo que el año anterior, y más que el otro año anterior, cuando durante el kirchnerismo había 30 o 32 %”, contestó ante una pregunta en torno a si el Gobierno no debería hacer una autocrítica por el fracaso de sus pronósticos en torno a esa medición.

Al respecto, sostuvo que “estamos apuntando al 15 %, algunos estiman que será más, pero estamos convencidos de que este es el camino y entendemos la impaciencia que genera en el bolsillo, en la economía familiar”. Los pronósticos internos y externos (del propio Fondo Monetario Internacional) ubican la inflación para este año cerca del 20 %.

Agregó que “estamos convencidos que la inflación va a seguir bajando, la actividad económica está dando buenos números en muchos rubros. Bajar la inflación mucho más fuerte implicaría un costo social que no vamos a asumir”, aclaró. Y aseguró que “lo más complejo de la inflación está terminando ahora, sabíamos que los primeros cuatro meses eran más complejos por los reacomodamientos tarifarios que faltaban”.