En una jornada histórica, la Cámara de Diputados debatirá hoy el proyecto sobre la legalización del aborto. Con un leve cambio de tendencia de última hora, la disputa en el recinto se emparejó más ayer, y abrió paso a un desenlace cargado de incertidumbre. Menos de 24 horas antes de la sesión, la ventaja de los que rechazan la reforma sobre los que la promueven se redujo a sólo cinco votos.
Ese escenario de virtual paridad, que hasta anteayer mostraba una ventaja de ocho votos para el rechazo de la iniciativa, se reforzó ayer con la emisión de un dictamen de mayoría favorable a la legalización. La diferencia en la cantidad de firmas renovó las expectativas de los promotores de la reforma: hubo 64 a favor y 57 en contra.
En tanto, la Plaza del Congreso se dividirá en dos sectores con un vallado, para evitar el contacto entre agrupaciones a favor y en contra del proyecto de despenalización del aborto.
Quedó definido que la Plaza estará dividida y se pondrá un “corredor seguro” delimitado por vallas: se acordaron las zonas que tendrán ambas partes teniendo en cuenta “un reparto equitativo”, además de la ubicación de los espacios para la prensa, las pantallas de proyección y los puestos de Defensa Civil y del SAME.
Además se definieron las zonas que cada uno de los grupos tendrá para acceder al entorno del Congreso, y en donde colocarán sus escenarios y carpas temáticas. Se estableció que no habrá circulación vehicular por la Avenida de Mayo desde Congreso a 9 de Julio, y se cortará la zona aledaña al Parlamento.