El jefe de Gabinete Marcos Peña disfrutó de observar el rostro María Eugenia Vidal, su principal enemiga dentro del PRO, cuando Nicolás Dujovne le anunció que se se tendrá que hacer cargo del transporte y las empresas eléctricas que hoy banca la Nación. La duda es si también le trasladará la empresa de agua AYSA.
Desde su entorno en la gobernación de La Plata dicen que la mandataria está angustiada, que está pasando sus peores horas, luego que el presidente le adelantó que piensa cumplir con el pedido del FMI de bajar el déficit fiscal y por lo cual debe hacerse cargo de las empresas del Estado.
Vidal intentó juntar a los intendentes peronistas para que la ayuden a oponerse a la medida, pero el presidente se reunió con ella y Horacio Rodríguez Larreta y fue claro: “Acá el sacrificio es de todos y ustedes son de mi espacio, tienen que obedecer, deben sacrificarse para que los gobernadores también cedan”, dijo un Macri enojado.
Nicolás Dujovne decidió trasladarle a la gobernadora Edenor y Edesur (25.000 millones), subsidios al transporte (50.000 millones), AYSA (15.000 millones), Gendarmería y prefectura (10.000 millones) y especialmente a CABA la justicia ordinaria (5.000 millones).
Por ahora no esta confirmado el traspaso de la empresa de agua pero si las eléctricas y el transporte. El problema de Vidal es además del costo económico el costo político. A partir de los traspasos será la gobernadora la responsable de los aumentos de tarifas eléctricas y de transporte.
Un dato que no se refleja en los medios oficialistas es que diariamente hay cortes en los barrios del Gran Buenos Aires: cortes en Lanús, Lomas de Zamora, Esteban Echeverría, Florencio Varela, Quilmes, Berazategui o Almirante Brown por nombrar los municipios del sur del conurbano. A partir de ahora, los vecinos reclamarán a Edusur y a continuación a la gobernadora. Lo mismo sucederá con el transporte: cada vez que haya aumentos la responsable será Vidal.
Hoy la gobernadora esta pasando un mal momento. En una encuesta publicada ayer por la Consultora Tendencias, al preguntarle a los bonaerenses por su gestión los números son muy negativos: Muy mala (29,2), Mala (17,7), regular (17,3), lo que da un 64,2% negativo, mientras que la opinión positiva suma un 35,8% (Muy buena, 18,1 y buena 17,7).
Como si fuera poco, la senadora Teresa García denunció ayer a la gobernadora en el Juzgado Federal número 3 de La Plata por el escándalo de la falsificación de aportantes para lavar dinero durante la campaña de Cambiemos en la Provincia de Buenos Aires. La senadora pidió que se abra una investigación por los delitos de usurpación de identidad, falsificación de documento, lavado de activos y violación de secretos de la privacidad.
Con estos números, la gobernadora ha dejado transcender que no ira por la reelección y aceptará la propuesta del presidente para acompañarlo como vice.