Cristina Kirchner lo dijo con todas las letras: “Está claro que más temprano que tarde van a buscar meterme presa, como sea. Ok, podrán hacerlo, porque ya sabemos cómo opera esta gente. Pero eso no va a impedir que entre diciembre y marzo vayamos hacia una hiperinflación”.
Así lo reveló en las últimas horas un cercano colaborador de la ex presidenta, quien reconoció que “a pesar de la cacería que lanzaron Bonadio y los grandes medios contra ella, Cristina está tranquila, pero también es consciente de que es tan brutal la persecución que, en este contexto, su detención podría llegar a ser un hecho casi inevitable”.
Como una manera de contrarrestar la embestida judicial / mediática de la que es objeto, el martes pasado Cristina convocó a un importante grupo de intendentes del conurbano bonaerense a sus oficinas del Instituto Patria.
Ahí les pidió que mañana no falte ninguno al acto que se realizará en Ensenada, y que cerrará su hijo, Máximo Kirchner. “En este momento tan duro, tenemos que mostrarnos unidos”, fue el mensaje de la ex presidenta.
Fue en ese marco que Cristina trazó un más que preocupante panorama sobre el futuro inmediato de la crisis económica: “Macri se va a quedar sin dólares -advirtió- y va a tener que hacer lo que nos critica a nosotros: emitir”. Y seguidamente lanzó un pronóstico apocalíptico: “Entre diciembre y marzo, vamos a una hiperinflación. Será inevitable”.