El precio del kilo de pan volvió a dispararse y ya se cobra hasta 90 pesos en algunas panaderías de Buenos Aires por efecto de la disparada del dólar y el impacto en la bolsa de harina.
Tras la devaluación de las últimas semanas, la bolsa de harina trepó de $600 a $850 y hasta casi mil pesos y eso se trasladó al precio en el mostrador. En Capital Federal el kilo ya se vende a 90 mientras que en el interior de la provincia subió a un promedio de 70 pesos el kilo pero se vende también hasta a 85 pesos el kilo.
La crisis que atraviesa el sector como consecuencia de la inflación es tremenda: en la provincia aseguran que ya cerraron 200 panaderías en lo que va del año por no poder sostener la producción ni las ventas. En este contexto, el vicepresidente de la Federación Industrial Panaderil de la provincia de Buenos Aires, Emilio Majori, advirtió que el escenario se complicó por el salto que pegó el precio de la harina, trepó de 600 a “casi 1000 pesos la bolsa, 400 pesos de aumento” en una semana.
A todo esto se le suman los incrementos en las tarifas “en febrero, en esta panadería pagábamos dos mil pesos de gas, en marzo nos vinieron 22 mil”, lo mismo sucedió con la electricidad, contó Majori a FM Cielo. “Vamos a tener que echar gente”, advirtió y dijo que “es caótica la situación del industrial panadero”. “No vamos a poder seguir trabajando”, cerró.
Frente a este escenario complejo, el periodista Pablo Duggan volvió a justificar la suba de precios y el rumbo del plan económico de Cambiemos. Al hablar del aumento en el precio del pan, el panelista sostuvo insólitamente que es una “oportunidad” para que la población cambie sus hábitos alimenticios.
“La crisis tal vez es una oportunidad para cambiar hábitos alimenticios no buenos de la población. Es una oportunidad para consumir comidas mas baratas y que son mas nutritivas, como los granos. Lentejas, porotos, las legumbres”, aseguró Duggan ante el cuadro que reflejaba los aumentos en alimentos básicos.