El 30 % de las personas con HIV en Argentina -alrededor de 15 mil personas- corren el serio riesgo de quedar sin tratamiento como consecuencia de los brutales ajustes que plantea el gobierno de Mauricio Macri para el presupuesto 2019, y que, entre otros sectores, afectará a la Dirección Nacional de Sida, que dispondrá de $ 1.724 millones menos para tratar a quienes se tratan el virus.
En la actualidad, unas 64 mil personas están con tratamiento de HIV a cargo del Estado nacional. Pero, en caso de que el Congreso apruebe el proyecto de presupuesto para el año próximo, el recorte significará que aproximadamente 15 mil personas se queden sin tratamiento, y otras 3 mil para tuberculosis.
“El 60 % de la inversión en antirretrovirales y medicamentos para el VIH se compra a compañías farmacéuticas multinacionales; su precio está dolarizado. Con 43 millones de dólares menos en el presupuesto, va a haber muchos que nos vamos a quedar sin medicación. Sin medicamentos nos vamos a morir”, advirtió con dramatismo José María Di Bello, secretario de Fundación GEP (Grupo Efecto Positivo).
En Argentina hubo faltantes de medicamentos en los años 2001, 2016 y 2017 y muchas personas debieron interrumpir sus tratamientos. También renunciaron tres titulares de la Dirección Nacional de Sida, por deficiencias en las compras de tratamientos en los últimos 3 años.
Por su parte, Lorena Di Giano, directora Ejecutiva de Fundación GEP, aseguró que “en estos tres años se concretaron muy pocas compras de medicamentos antirretrovirales, es decir, no habría stock para cubrir las necesidades de las personas en tratamiento. La disolución del ministerio de Salud y la reducción de presupuesto, se da en un marco crítico”, por lo que “el Congreso no debería aprobar el recorte porque atenta contra la vida de miles de personas”.