Por Alfredo Silletta. Mientras los medios de comunicación se quedaron con la foto de Jair Bolsonaro y Mauricio Macri, hubo otra reunión no menos importante entre los ministros de Justicia, Sergio Moro y Germán Garavano, donde el argentino, a pedido del presidente Macri, le pidió detalles sobre la causa trucha que encarceló a Lula da Silva y su proscripción para presentarse como candidato a la presidencia. El gobierno argentino está muy preocupado porque en todas las encuestas la ex presidenta marcha primero y día a día crece el volumen político de un futuro Frente Patriótico de oposición.
Cómo se recordará, Moro condenó al líder del PT a 9 años de prisión sin una sola prueba, solo su “sensación” que era corrupto. Hoy el gobierno argentino y su títere en la Justicia, el juez Claudio Bonadio, avanzan contra la ex presidenta pero al gobierno se le hace difícil detenerla y enviarla a prisión, mucho más que no sea candidata presidencial.
Como ya es habitual, cada vez que se conoce una mala noticia del gobierno –la ultima fue la inflación récord del 47%- el juez lanza un nuevo ataque contra a la actual senadora. Por estas horas reactivo la causa de las fotocopias y solicitó la detención de Isidro Bounine, un ex secretario de Cristina Kirchner. El argumento de este juez, que seguramente termine preso cuando se vaya del gobierno Mauricio Macri, se concretó después de homologar el acuerdo del ex ministro de Hacienda de Santa Cruz, Juan Manuel Campillo, que fue “apretado” para que se convierta en arrepentido.
Lo llamativo del caso Campillo sucedió el pasado 9 de enero, cuando el editor de La Nación, Carlos Pagni, contó que Bonadio y los servicios de inteligencia, que todavía maneja Jaime Stioso, “forzo” a Campillo a que denuncie a la ex presidenta y de allí que involucró al ex secretario de la ex presidenta, Isidro Bounine. Ayer sucedió lo que el periodista “adelanto” hace 8 días y Bounine terminó preso.
Más allá que los favores del juez Bonadio, hoy Cristina puede ser candidata presidencial si lo desea, de allí que German Garavano le pidió precisiones al ex juez Moro para buscar la vuelta de la proscripción y presión de la ex presidenta.
1 comentario
Bueeeno seria mejor ir pensando en meter preso a Mau y toda su pandilla de estafadores No ??? Alguna idea ???