La orden del presidente sobre el ministro Germán Garavano fue contundente: me salvan la causa Cuadernos y me protegen a Carlos (Stornelli). El gobierno, el juez Bonadio, el fiscal Stornelli y algunos periodistas de La Nación y Clarín están desesperados que se cae a pedazos la causa de las fotocopias, en parte por los ‘aprietes’ de Stornelli y Bonadio a los empresarios para que denuncien a Cristina. Días atrás se conoció la apretada que le hicieron al empresario Ferreyra al pedirle que denuncie la “mugre” del matrimonio Kirchner. Como no lo hizo fue preso. Fotocopias del chofer Centeno, falsos peritos y testimonios como el de Marcelo D’Alessio llevan irremediablemente a la muerte de la causa. De allí que en las últimas horas le pidieron al chofer que vuelva a escribir una hojas y agregue nuevos datos de cómo se manejaba la ex presidencia. Todo tan obvio que si no fuera grave, daría a la risa.
Mientras tanto, el juez Alejo Ramos Padilla dispuso una serie de medidas de investigación, en especial la relación de la banda comandada por Marcelo D’Alessio y los espías de la AFI. La investigación parte de una serie de medidas tomadas por el fiscal Juan Pablo Curi, que en un principio se había mostrado contrario a la investigación del juez. El fiscal pidió 44 medidas, de las cuales el juez comenzó con algunas.
Entre las medidas que llamaron la atención es la vinculada al operador de Clarín, Daniel Santoro, quien había dicho que había ‘borrado’ los mensajes de su celular para no entregárselo al juez. Curi solicitó que se confirme con las empresas de telefonía el número celular de Santoro y que, si Ramos Padilla lo consideraba pertinente, que se requieran “los listados de comunicación de esa línea; ello así, en miras a determinar si ese periodista tenía contacto habitual con alguno de los miembros de la organización delictiva que se investiga en el marco de los presentes actuados”. Ramos Padiĺla tuvo presente el pedido pero aún no definió qué hacer.
El fiscal Curi también pidió que se investigue si la Unidad de Información Financiera (UIF) realizó algún informe sobre el Roberto Porcaro. Sin mencionarlo, el tema vincula también a Santoro, ya que éste le dijo a D’Alessio que tenía información de la UIF al respecto. Curi pidió que se evalúe citar a declaración testimonial a Porcaro.
El fiscal solicitó que se evalúe convocar a declaración testimonial a Mirtha Legrand e Ignacio Viale, en el marco de lo que se conoció como Operación Jaitt, hecho por el cual ya declararon Gustavo Vera y el ex SIDE y fiscal Eduardo Miragaya. A su vez, que se consulte a la Dirección Nacional de Migraciones y al sistema Nosis si hubo consulatr sobre Jorge Christian Castañon Destefano, uno de los casos que más complica al fiscal Stornelli.
Por su parte, Ramos Padilla resolvió aceptar a la ex abogada de Leonardo Fariña, Giselle Robles, como querellante. La abogada se presentó por su cuenta y aportó documentación que muestra que las declaraciones de Fariña en las causas contra ex funcionarios kirchneristas fueron guionadas.