12.5 C
La Plata
1 octubre, 2024
PAÍS

Un Macri perdido y desorientado no encuentra lugar en la política: día tras día se desvanece su imagen y ya es una sombra

Por Eduardo D’Argenio.- “Está decidido que Mauricio Macri no esté expuesto en la primera línea de fuego, porque está claro que sería el punching ball del oficialismo”. Así, con crudeza y sin ocultar que en realidad el ex presidente genera cada vez más vergüenza en su espacio político, lo dijo Patricia Bullrich.

De esta manera, la ex ministra de Seguridad se refería a ese objeto que utilizan los boxeadores para entrenarse y que recibe golpe tras golpe, y recurrió a tal imagen para intentar esconder a quien hace tan sólo siete meses atrás obtuvo casi 10 millones y medio de votos, y que hoy por hoy se muestra perdido, desorientado.

En este presente que no esperaba -y que tampoco alcanza a entender-, con una pandemia que afecta al planeta, y sintiendo una inmensa frustración por no haber podido materializar su portentoso desembarco al frente de la Fundación FIFA, Macri en algún momento buscó una brújula que lo ayudara a reacomodarse, pero sus tibios intentos quedaron en la nada.

“Si a la oposición intentan dividirnos, como ya pasó en la historia argentina, nosotros tenemos que cuidarnos”, fue la endeble excusa que ensayó Bullrich a la hora de buscar proteger a su ¿todavía? jefe político.

Después de dejar el poder el 10 de diciembre, a Macri no le quedó más alternativa que entregarse al descanso -lo que mucho no le costó- y al bajo perfil. Ese reacomodamiento se caía de maduro, teniendo en cuenta que la brutal herencia socioeconómica que le dejaba al gobierno de Alberto Fernández, aconsejaba esperar un buen tiempo antes de asomar.

A pocos días de haberse decretado la cuarentena obligatoria, se contactó con el presidente para transmitirle su preocupación por el impacto económico de la medida, mientras morían de a miles en Europa diariamente, a pesar de lo cual le llegó a recomendar no ser tan estricto con el aislamiento. Y ya no habría más mensajes entre ellos.

En algún momento Macri también pretendió volver a liderar reuniones virtuales con la mesa chica del PRO, con el objetivo de bajar línea hacia una mayor dureza con el Gobierno. Horacio Rodríguez Larreta y María Eugenia Vidal pegaron el faltazo a algún zoom, y el ex presidente solo encontró eco en el ala dura, personificada públicamente por Patricia Bullrich y Miguel Ángel Pichetto.

Y el paulatino aislamiento que fue sufriendo con el correr de los días, se reflejó en cómo se profundizaron las diferencias con quienes tienen que gestionar, como gobernadores e intendentes: desde Rodríguez Larreta, que se muestra cerca de Alberto F., hasta su primo Jorge Macri, jefe comunal de Vicente López, que no dudaron en darle la espalda, al considerar que no son tiempos como para salir con los tapones de punta contra el gobierno del Frente de Todos.

Fue entonces que intentó con los legisladores “del palo”, quienes, salvo contadas excepciones, no disimulan su escaso interés por lo que dice el ex mandatario, preocupados como están, ante este escenario, de trazar una colaboración constructiva con el oficialismo.

Ya más recientemente, en el colmo de la desorientación y sin encontrar un rumbo más o menos viable, Macri no tuvo mejor idea que haber firmado una proclama protoliberal contra los presuntos autoritarismos y populismos que se enancan en la pandemia. Acompañado por personajes de la derecha como Mario Vargas Llosa y el ex jefe de Gobierno español, José María Aznar, entre otros, criticaron a Cuba, Nicaragua, Venezuela, y Argentina. Pero hete aquí que “se olvidaron” del nefasto Jair Bolsonaro, que con sus políticas ya llevó a la muerte a miles de personas en Brasil.

Precisamente, para muchos de quienes todavía siguen formando parte de Juntos por el Cambio, esa fue la gota que rebasó el vaso, y aunque no lo digan de manera pública, la actitud de Macri generó vergüenza en no pocos referentes de su coalición.

También en info135

Cristina Kirchner convocó a la movilización universitaria de mañana: “Marcharán por su presente y por su futuro”

Eduardo

Ya está todo cocinado: confirmarán la condena a seis años de prisión de Cristina Kirchner por la causa Vialidad

Eduardo

Llega octubre y se vienen aumentos en tarifas, transporte, celulares y colegios

Alfredo Silletta

1 comentario

Desesperado con ilusión 14 mayo, 2020 at 12:18 pm

Macri es un caso típico de político que cree que llegó a gobernar por sus grandes méritos personales y no se quiere convencer de que no ha sido más que un instrumento de “usar y tirar” para los que mandan de verdad.

Respuesta

Salir de los comentarios