El presidente Alberto Fernández anunció la intervención del Servicio Penitenciario Federal y nombró a la prestigiosa ex jueza Maria Laura Garrigós de Rébori luego de los escándalos sobre grabaciones a presos políticos y a sus abogados. Paralelamente manifestó su “enorme preocupación” ante el espionaje de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) durante el gobierno de Macri. “Espero que la Justicia haga lo que tiene qué hacer” con las denuncias, dijo Fernández en declaraciones a Radio 10. Horas después de la entrevista con el Gato Sylvestre trascendió el nombre de la ex jueza y fundadora de Justicia Legítima.
Fernández reiteró, en ese marco, su “enorme preocupación” por la presuntas actividades de espionaje ilegal desplegadas durante el gobierno de Mauricio Macri, de acuerdo con la denuncia formulada por la actual titular de la AFI, Cristina Caamaño, a partir de evidencias encontradas en el organismo y presentadas ante la Justicia. ”Nosotros nos pasamos hablando de lo que presumíamos qué ocurría en los medios, y nadie se ocupó de levantar esas palabras nuestras para investigar; ahora resulta que apareció una investigación”, remarcó el Presidente. ”Como yo siempre digo, eso es un tema de la Justicia, y espero que la Justicia actué como debe actuar”, dijo y añadió: “Lo que sí debo garantizar yo como Presidente es que eso nunca más vuelva a ocurrir”. Al referirse a las denuncias sobre presuntas escuchas a detenidos, y sus abogados o visitas, el mandatario reflexionó: “Yo he ido a Ezeiza muchas veces y seguramente yo estaré también allí escuchado”. En esa línea, citó una frase del ex procurador Esteban Righi (“a un gobierno se lo juzga por sus cárceles”) y analizó que, “según se trate a los presos, es un gobierno que se preocupa o no de los derechos de la gente”. ”Para mí eso es una obsesión”, dijo Fernández y aseguró que “no quisiera que las cárceles funcionen como han funcionado hasta ahora”.
Allanan el Penal de Ezeiza. Durante el día de hoy, el juez Federico Villena, ordenó allanar el penal en búsqueda de micrófonos y cámaras que se habrían utilizado para espiar a los presos políticos del macrismo.
Días atrás, el juez Villena había allanado las oficinas de la Dirección de Análisis de Información del SPF, el sector de inteligencia conocido por el nombre de “Área 50”; también en búsqueda de elementos que permitiera determinar si se realizaron maniobras de espionaje ilegal en las cárceles federales. Del allanamiento realizado en el “Área 50” habrían surgido elementos que precipitaron el nuevo allanamiento; aunque algunos datos surgieron también de audios difundidos por un programa de televisión en los que agentes de inteligencia hablaban de “alambrar” la cárcel (poner micrófonos), que fueron incorporados en estos días al expediente. El lunes, el canal de noticias C5N informó que personal ajeno al servicio penitenciario había ingresado al pabellón B del módulo 6 del penal de Ezeiza a realizar tareas de “limpieza”, lo que fue interpretado en el mundillo judicial como una eventual maniobra para ocultar prueba. En ese penal estuvieron detenidos, entre otros, el ex vicepresidente Amado Boudou; el ex secretario de Legal y Técnica de la Presidencia y actual Procurador del Tesoro Carlos Zannini; el dirigente Luis D’Elía; y el ex funcionario Carlos Kirchner, primo del ex presidente.