El animal había llegado al Bioparque de la ciudad en el 2015 y durante el último tiempo, a raíz de su longevidad, contaba con atención permanente brindada por un equipo de especialistas que le garantizó su bienestar hasta sus últimos momentos. Hoy, a sus 19 años, “Juan” falleció y causó mucho dolor entre los médicos y responsables de su cuidado.
El ejemplar estaba en el Bioparque desde marzo de 2015 y, junto a la yaguareté Luna, habían llegado con la finalidad de reproducción y conservación de la especie provenientes del ex zoológico de Florencio Varela. Desde su llegada a La Plata había sido alojado en un ambiente que se construyó especialmente diseñado para este tipo de felinos. El hábitat era uno de los más modernos del país para la especie: contaba también con características selváticas (vegetación, cascada, ojo de agua) y un espacio interno calefaccionado para el invierno.
Durante el último tiempo el equipo veterinario del Bioparque y especialistas en Medicina Felina de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad Nacional de La Plata atendieron de manera constante al yaguareté, a raíz de su avanzada edad y con el objetivo de preservar el bienestar del ejemplar.
Es válido destacar que, según datos oficiales, los yaguaretés tienen una expectativa de vida de entre 12 y 15 años en su hábitat natural, mientras que en condiciones de cautiverio alcanzan un máximo de 20 años.
En ese sentido, el yaguareté se encontraba en un estado de movilidad reducida y con dificultades para ingerir alimentos e hidratarse, por lo que se le administraba una terapia de sostén. La misma consistía en suplementos vitamínicos, antiartríticos y calmantes en general, para que sobrelleve sus últimos tiempos de vida de la mejor manera posible con el principal objetivo de reducir el dolor gerontológico al mínimo.
Asimismo, el animal cursaba una insuficiencia renal por lo que se lo mantenía compensado a base de una dieta hipoproteica.
También al ejemplar se le había realizado la exploración clínica, corte de las uñas, limpieza dentaria, toma de muestra de sangre y orina para control de laboratorio, estudios ecográficos y radiografías.
“Queremos resaltar el enorme esfuerzo que realizó el personal y el cuerpo veterinario para mantener su estado y que el animal no sufra. Se trataba de un yaguareté muy longevo”, explicaron voceros de la Comuna.
Durante sus años de vida, el ejemplar formó parte de importantes acciones conjuntas con la Dirección de Fauna de la Nación como, por ejemplo, recabar registros genéticos, con el objetivo de aportar al mapeo general de los yaguaretés que estaban en cautiverio en nuestro país.
Cabe destacar que el yaguareté o “Tigre Sudamericano” es un félido de la subfamilia de los Panterinos y género Panthera, y la única de las cuatro especies actuales de este género que se encuentra en América. La especie está calificada en la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza como «especie casi amenazada» y su número está en declive.