La malintencionada y falaz campaña llevada adelante por el macrismo y los grandes medios hegemónicos, recibió hoy un duro mazazo por parte del laboratorio Pfizer, cuando desmintió de manera categórica las acusaciones de la titular del PRO, Patricia Bullrich, con respecto a las supuestas coimas del Gobierno para firmar contratos y conseguir vacunas contra el coronavirus.
Durante la reunión con representantes de laboratorios fabricantes de vacunas que se llevó adelante en el Congreso de la Nación, los representantes de la compañía farmacéutica en Argentina, Nicolás Vaquer y Miguel del Pino, respondieron a las preguntas de los diputados y negaron estas teorías expresadas por la ex ministra de Seguridad.
El diputado del Frente de Todos, Pablo Yedlin, consultó si hubo algún pedido de retorno, coima o la exigencia de parte del Estado de colocar un intermediario entre el laboratorio y la compra de vacunas. Como respuesta, Vaquer sostuvo que “en ningún momento se le realizaron pedidos de pago indebidos o exigencias de intermediarios a Pfizer”.
Y enfatizó que el actual marco legal para la provisión de vacunas en Argentina “no es compatible con los requisitos del contrato” debido a las cláusulas de “indemnidad y otras protecciones” que la farmacéutica busca negociar con el Ejecutivo.
Por otro lado, pero también en referencia a las condiciones de la negociación, aclaró que desde Pfizer no tienen interés en interferir con los bienes del Estado, “incluyendo los recursos naturales, las reservas del Banco Central, activos militares, estratégicos o culturales del Gobierno”.
En tanto, afirmó que el laboratorio que representa ofreció en julio del 2020 la entrega de 13,3 millones de vacunas. Sin embargo, desmintió a la oposición debido a que la mayor parte de la entrega sería recién en la segunda mitad del 2021 y no a comienzos, como el macrismo asegura.
Vaquer indicó que el acuerdo era preliminar debido a que Pfizer ni siquiera tenía una vacuna desarrollada en ese momento. El acuerdo ofrecido a la Argentina era la entrega de un millón de vacunas antes de fin de año de 2020, 2 millones más en el primer trimestre, 5 millones en el segundo trimestre y las restantes 5 millones de dosis, en el último trimestre.
El macrismo había mentido en los medios de comunicación al decir que con Pfizer se podrían haber tenido 14 millones de vacunas en el verano, y así inmunizar a la población de riesgo. El dato falso fue desmentido por el propio laboratorio.
Por su parte, el presidente del laboratorio Richmond, Marcelo Figueiras, confirmó que el próximo 19 de junio estará terminado el primer lote de la vacuna Sputnik Vida -la versión local de la elaborada en Rusia y aplicada en el país-, para pasar a ser analizada tanto por la Anmat como por el Instituto Gamaleya, encargado del desarrollo original.
Y comentó que ese laboratorio, encargado del envasado del principio activo que llega desde Rusia, estará en condiciones de elaborar 500 mil dosis por semana, con una expectativa a mediano plazo de producir cinco millones de dosis mensuales.
Mientras, y en medio de la polémica sobre las negociaciones con Pfizer, el jefe del interbloque de diputados de Juntos por el Cambio, Mario Negri, aclaró que desde la oposición no tienen “ningún falso nacionalismo por el trabajo que pueda hacer otro laboratorio acá, tenemos una obsesión porque haya vacunas y que la gente no se muera”.
Precisamente, Negri utilizó la palabra “obsesión”, mencionada días atrás por la ministra de Salud, Carla Vizzotti, para describir la actitud de referentes opositores respecto a la contratación de Pfizer.
En la apertura de encuentro, el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, había asegurado que el objetivo de la reunión con los laboratorios era “tener la máxima información en un tema que es de gran sensibilidad para la sociedad”, al tiempo que anunció que se conformará un observatorio en el Congreso.
La decisión de convocar a los representantes de los laboratorios había sido resuelta el miércoles pasado por el titular del cuerpo, que contó para ese fin con el respaldo de la mayoría de los bloques legislativos.
Y anticipó que la semana próxima habrá una reunión del mismo tenor con otros representantes de laboratorios, que seguramente serán los referentes diplomáticos de Rusia y de China, productores de las vacunas Sputnik V y Sinopharm que se aplican en la Argentina.
Como se trata de representantes estatales, además de la convocatoria a través de la Comisión de Salud, tiene que intervenir la Comisión de Relaciones Exteriores que preside Eduardo Valdés.
“Después de 20 años, es la primera vez que el Congreso cita a actores del sector privado”, enfatizó Massa sobre el final de la reunión que se extendió por casi tres horas, y reconoció el “marco de respeto y seriedad” que se mantuvo durante el encuentro.