Sin la presencia de las dos posibles candidatas a enfrentarse en la PASO de la Ciudad de Buenos Aires, María Eugenia Vidal y Patricia Bullrich, los máximos referentes de Juntos por el Cambio intentaron mostrar una falsa imagen de unidad, con el objetivo de bajar el tono de la discusión interna, aunque sólo para la tribuna, ya que puertas adentro el panorama no hace más que reflejar una tirantez imposible de ocultar o disimular.
El hecho es que, durante el cónclave que se extendió por algo más de 40 minutos, se plantearon varias posturas y muy pocas conclusiones, y por ahora se logró llegar a un acuerdo que para algunos es fundamental. No dejó de llamar la atención que Mauricio Macri ocupara el centro de la mesa, y quien suena como el presidenciable para 2023, es decir, el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, en un sector lateral.
Mientras la idea del de nombre de la coalición no apareció durante el encuentro, y todo el tiempo se intentó bajar un mensaje de “unidad porque enfrente está el Gobierno”, eso desaparece cuando se sale de la discusión macro y se baja a cada uno de los distritos. El mejor ejemplo de esto lo dio Jorge Macri, cuando señaló que el diálogo fue “muy bueno” pero no dejó pasar la oportunidad para advertir que “los candidatos de la provincia se definen en la provincia, no en otro distrito” en un claro mensaje a Horacio Rodríguez Larreta que empuja a Diego Santilli para competir en Buenos Aires.
Otro punto que genera tensión es el caso de María Eugenia Vidal. Uno de los asistentes confió que Mauricio Macri, quien viene señalando que la ex gobernadora tiene que ir a jugar en la provincia, “no hizo ninguna referencia al respecto”. Pero, reinó en el ambiente un consenso de que no le queda mucho tiempo para definir. “Es seguro que ella no va a ir a la provincia, aún falta definir si va a la Ciudad. No le queda mucho tiempo, la semana que viene va a tener que tomar una decisión”.
La primera conclusión que queda de la cumbre, es que por ahora la coalición mantendrá el nombre, que los partidos juegan dentro de Juntos por el Cambio y que en los próximos días se armará una mesa con un representante de cada uno de los socios para definir el piso del porcentaje de votos necesario para, en el caso de ir a una PASO, entrar en las listas.
La segunda, es que la prédica de unidad con la que viene insistiendo Macri, tiene límites. “Las PASO son una herramienta que vamos a utilizar en todos los distritos en donde no hay unidad. Y esto es hasta ahora en casi todos. En Córdoba, en Formosa, en Buenos Aires, en Santa Fe, en la Ciudad”, ejemplificó uno de los presentes en el Galpón de los Milagros.
Macri busca que en el distrito porteño se pueda consensuar una lista de unidad, pero Patricia Bullrich da muestras de que está dispuesta a competir con Vidal. Sus allegados deslizan que está avanzada la posibilidad de que sume a su nómina para las PASO a radicales disidentes como Luis Brandoni.
Además del ex presidente, del cónclave participó por primera vez en la mesa nacional su primo, el intendente de Vicente López, Jorge Macri, que viene resistiendo la estrategia de Horacio Rodríguez Larreta de postular a Diego Santilli en la provincia de Buenos Aires. Junto con las autoridades de la UCR y la Coalición Cívica, pidieron tener voz y voto en las decisiones sobre ese distrito.
Entre otros, se destacó la presencia del titular de la UCR, Alfredo Cornejo; el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales; el auditor Miguel Ángel Pichetto; el titular del interbloque de Diputados, Mario Negri; el jefe del bloque del PRO, Cristian Ritondo; los senadores Martín Lousteau, Luis Naidenoff y Humberto Schiavoni; y por la Coalición Civica, Maximiliano Ferraro.
También asistieron los presidentes de los tres partidos de la provincia de Buenos Aires: además de Jorge Macri, estuvieron Maximiliano Abad (UCR) y Maricel Etchecoin (CC-ARI), lo que marcó el principal tema de la reunión: la disputa encarnizada que tienen en territorio bonaerense entre los propios.
Sobre las PASO, pusieron algunas reglas estrictas: en ningún distrito los que integren Juntos por el Cambio podrán ir por afuera del frente electoral, bajo la amenaza de ser intervenidos. En el encuentro discutieron sobre el piso -un factor importante para sumar aliados como Ricardo López Murphy en la Ciudad o José Luis Espert en provincia- y sobre el uso del sistema D’Hont para alternar candidatos en la lista definitiva, en caso de internas.