Como parte de la Cumbre de jefes del G-20 que se realizará el próximo fin de semana, Alberto Fernández viajará mañana con destino a Italia para participar de ese encuentro, y tras su finalización, se dirigirá rumbo a Escocia para intervenir en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26).
Se trata de una gira que tiene como ejes la salida de la pandemia, la necesidad de disminuir la huella ambiental y, para la Argentina, la renegociación de su deuda con el FMI y una reforma de la arquitectura financiera global.
Por eso mismo, las mayores expectativas de este viaje están puestas en las reuniones que mantendrá con la Directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, la canciller alemana, Ángela Merkel, que transita las últimas semanas de su histórico gobierno de 16 años, y la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen.
El encuentro con Georgieva se produce mientras crece la posibilidad de arribar a un acuerdo con el Fondo en pocas semanas, pero sin encontrar, por ahora, las herramientas que permitan destrabar las diferencias, que tienen que ver con la marcha de la economía argentina en los próximos años.
De ahí que esta gira puede servir para empezar a destrabar ese nudo. En Roma, la Argentina buscará que los mandatarios del G-20 apoyen su moción de reestructurar la arquitectura financiera mundial, comenzando por un recorte en las sobretasas de interés.
Fernández volverá a postular la “necesidad” de un marco multilateral para la reestructuración de la deuda de los países de renta media ante el “riesgo generalizado de crisis de deudas externas en los países en desarrollo”.
Cabe destacar que Argentina tiene vencimientos por 17.800 millones de dólares de capital para el 2022 y 18.800 millones para el 2023, de acuerdo a los números que difundió el ministro de Economía, Martín Guzmán, quien cuestionó la deuda por 44.154 millones de dólares que contrajo el ex presidente Mauricio Macri.
La Cumbre de Roma será la 16ª reunión del G20 a nivel de Jefes de Estado y de Gobierno y, a diferencia de la realizada el año pasado en Arabia Saudita, que fue virtual, ésta será presencial, con lo cual hay mucha expectativa ya que en ese marco se pueden entablar reuniones bilaterales.
En su paso por Roma, el presidente estará acompañado por el canciller Santiago Cafiero; el ministro Guzmán y el embajador argentino en Washington, Jorge Argüello.
Fuentes oficiales remarcaron la “relevancia regional” que significará la presencia de Fernández en el foro mundial más importante del mundo, ante la ausencia del presidente de México, Manuel López Obrador, y el interrogante sobre si asistirá el de Brasil, Jair Bolsonaro.
El evento se celebrará en Roma el sábado 30 y domingo 31 de octubre, con la participación de los líderes de los países integrantes de ese bloque mundial, sus pares de los países invitados y los representantes de algunas organizaciones regionales.
Tras la cumbre del G20, el Presidente se trasladará de Roma a la ciudad escocesa de Glasgow, donde el 1 y 2 de noviembre se celebrará la Conferencia de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) sobre el Cambio Climático (COP26), bajo el lema “Uniendo al mundo para hacer frente al cambio climático”.
Semanas atrás, al confirmar su participación en la cumbre climática, Fernández adelantó que Argentina presentará una “estrategia de largo plazo de neutralidad de carbono”, anuncio que se conoció tras una videoconferencia con el secretario de Estado para el Desarrollo Internacional del Reino Unido, Alok Sharma.