El ministro de Economía, Martín Guzmán, detalló los alcances del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), anunciado minutos antes por el presidente Alberto Fernández: “Aquí no hay reformas laborales, privatización de empresas públicas o una reforma previsional. Apuntamos a solucionar los problemas de nuestra estructura productiva. El acuerdo permitirá que el país continúe la senda del crecimiento”.
Destacó que “transitamos meses de negociaciones dificilísimas”, pero que “finalmente sembramos condiciones para construir futuro”, ya que “se logró que la Argentina pueda llegar a un acuerdo sin que haya políticas de ajuste”.
El ministro anunció que en el acuerdo se plantea una reducción del déficit fiscal. Para este año, será del 2.5 % del Producto Interno Bruto (PBI); para el 2023 será 1.5 %, y para el 2024, 0.9 %.
Tras el anuncio del presidente Alberto Fernández acerca del acuerdo con el FMI, Guzmán y el jefe de Gabinete, Juan Manzur, brindaron una conferencia de prensa en el Palacio de Hacienda para precisar los lineamientos técnicos del entendimiento que anticipó el mandatario.
Durante el encuentro con los periodistas, el titular de la cartera económica destacó que “el propio Fondo reconoció que el programa falló, que no alcanzó ninguno de los objetivos planteados. Ese dinero se utilizó para financiar la salida de capitales y pagar deuda insostenible con acreedores externos. Esto nos dejó con una carga de deuda aplastante”, lo que “demuestra la magnitud del daño contra la Argentina”.
Según Guzmán, “terminamos en un lugar razonable, esta alternativa permite dar más previsibilidad, certidumbre y salir de un lugar de angustia para millones de argentinos. Se llegó al mejor acuerdo que se podía lograr”.
Por otra parte, Guzmán recordó que fue Juntos por el Cambio el responsable de tomar un “préstamo récord” de 57 mil millones del que se tomaron casi 45 mil millones de dólares. “El programa fue un profundo fracaso” para la Argentina, algo que “reconoció el propio FMI”.
“Ese dinero se utilizó para financiar la salida de capitales en la Argentina y pagar deuda que estaba en situación de insostenibilidad, dejó una situación con una carga de deuda aplastante para las posibilidades de desarrollo y en una condición de dependencia” al país.
En este contexto, lo que el gobierno del Frente de Todos buscó fue “sanar el presente tan fuerte que tenía la Argentina” y “sembrar condiciones para construir futuro”.
Se estableció que cada tres meses habrá revisiones y desembolsos para efectuar los pagos acordados, mientras que el remanente será utilizado para acumular reservas. “Plantemos tener el apoyo para refinanciar la deuda sin socavar las oportunidades de desarrollo de nuestra nación”, dijo, y puntualizó: “Para esto, necesitamos el apoyo del mundo para lo que está por venir”.
Y subrayó que “nunca estuvo en discusión que se buscaba un programa de facilidades extendidas para refinanciar los vencimientos del programa stand-by al que arribó el gobierno anterior”. “El monto del financiamiento es equivalente a ese acuerdo, alrededor de 44 mil millones de dólares”, detalló Guzmán.
Una vez que el programa esté aprobado por el Congreso y el Directorio del FMI, comenzarán los desembolsos. Para su devolución, “hay un cronograma de pagos definidos por el gobierno anterior” y “vamos a contar con dinero para pagar lo que venza y acumular reservas por el remanente”.
Al mismo tiempo, remarcó que “habrá expansión de la inversión pública para construir más ventajas para aquello que nos dé más valor y fortalecer el capital público”. Además, adelantó que “se trabajará en la administración tributaria, atacar la evasión especialmente en el sector de mayor contribución, y medidas contra el lavado de dinero”.
Respecto a la política de precios, detalló que “lo que se acordó respecto de la inflación es un enfoque integral en el cual se parte de la premisa que la inflación es un fenómeno multicausal. Hay múltiples factores que la explican y hay que atacarlos de forma concurrente”. Y agregó: “Los acuerdos de precios tendrán un espacio importante, que redunde en el crecimiento del poder adquisitivo y fortalecer a la demanda agregada”.
Además, precisó que “como parte del esquema fiscal va a haber una mayor focalización de los esfuerzos del Estado y una expansión de la inversión pública que tanto necesita la Argentina para poder generar más capacidad productiva y que el sector privado esté en condiciones que den lugar a una actividad más vibrante, se va a respetar la Ley de Financiamiento de la Ciencia y la Tecnología para que la Argentina vaya construyendo más ventajas”, expresó Guzmán.
Por último, Guzmán descartó una devaluación, por lo que “se seguirá en la misma línea y se plantea el objetivo de acumular reservas para favorecer la resiliencia en el frente externo”. En esa línea, subrayó que en 2022 se estima sumar 5 mil millones de dólares en las reservas, al compás de reforzar el ataque a los capitales especulativos.