Cristina Fernández de Kirchner se parece mucho a la Cristina de 2018, en la previa a la conformación del Frente de Todos y al lanzamiento de la fórmula presidencial de mayo de 2019. Desde hace un tiempo habla con todos, conversa y escucha con los que piensan parecido y los que opinan todo lo opuesto. Reuniones públicas y privadas, entre las que aparecen el embajador de los Estados Unidos, el economista liberal Carlos Melconian, gobernadores y dirigentes sociales y sindicales. A esas reuniones hay que sumarle sus apariciones públicas en Chaco, Avellaneda, Ensenada y El Calafate. Y desde hace dos semanas el diálogo con el presidente Alberto Fernández.
En las últimas horas, el periodista Pablo Ibáñez contó que la “Mesa chica” de la CGT se reunió con la vicepresidenta para analizar la situación económica del país, especialmente la presión destituyente de los mercados hacia el gobierno nacional.
Hace 15 días, a través de la senadora nacional Juliana Di Tullio, el dirigente Héctor Daer conversó con Cristina Kirchner y a partir de ahí se amplió una charla con toda la Mesa chica. En el último encuentro participaron Andrés Rodríguez de UPCN, Gerardo Martínez de la UOCRA y José Luis Lingeri de OSBA. No estuvo Pablo Moyano, pero es un dirigente que tiene diálogo más directo con la vicepresidenta.
Más allá que no trascendieron detalles del encuentro, se analizó la situación económica del país, en especial la alta inflación, el debate de un Salario Básico Universal, la reapertura de las paritarias y un posible bono obligatorio para los estatales y privados que ayudará a la economía de los trabajadores.
Mesa chica de la CGT. Hoy la conducción de la central obrera se reunirá con la idea de convocar a una movilización contra los aumentos de precios, propuesta que lleva adelante el sector más combativo encabezado por Pablo Moyano y apoyado desde las dos CTA.
La central sindical mantiene una buena relación con el presidente Alberto Fernández pero desde las bases hay molestias por el aumento brutal de los alimentos que golpea el salario de los trabajadores.
En el Frente de Todos esperan el llamado de la CGT, que podría ser el próximo 7 de agosto Día de San Cayetano, para darle más volumen político y mostrar unidad ante el brutal avance de la derecha.