Cristina no se olvidó de la Gestapo antisindical de Vidal para perseguir y encarcelar dirigentes durante su gobierno

La vicepresidenta Cristina Kirchner, en su descargo por el pedido de la Fiscalía de 12 años de prisión en el juicio por la Obra Pública e inhabilitación para ocupar cargos públicos, no se olvidó de la pésima gestión de la ex gobernadora María Eugenia Vidal en la provincia de Buenos Aires. La vicepresidenta habló de la causa que se tramita en el Juzgado Federal Nº 3 de la Plata, a cargo de Ernesto Kreplak,  donde están procesados ex ministros y el intendente Julio Garro por perseguir dirigentes gremiales.

Cristina, desde su despacho en el Senado, recordó: “Se descubrió la Gestapo, en la ciudad de La Plata, donde un ministro de Trabajo de la gobernadora Vidal (Villegas) pedía una Gestapo para dirigentes sindicales”. Y agregó que “cuando este ministro tuvo que declarar en la Comisión Bicameral mandó a un abogado. Ese abogado (Rochetti) que declaró, según la jueza Arroyo Salgado a la que nadie sospechará de ser kirchnerista, es el que la sacó de las causas de lavado en San Isidro”.

Esta referencia la hizo para “reflejar cómo finalmente afloró lo que era un sistema judicial totalmente concentrado con los servicios de inteligencia creado desde la propia Casa Rosada a través de Mauricio Macri y de Fabián “Pepín” Rodríguez Simón que hoy está prófugo”. Además resaltó que “Pepín” es el “único dirigente político prófugo, y no es un peronista, es de ustedes los macristas. Ninguno de nosotros nos fugamos, nos quedamos acá en Argentina a rendir cuentas cuando ustedes huyen. Eso es lo que pasa hoy en la República Argentina”.

A continuación, la vicepresidenta recordó que después del año 2019 mientras se llevaba adelante este juicio nos enteramos que lo que sucedía con otras cuestiones judiciales. “En el curso de ese año comenzaron a aparecer las cosas que había hecho en materia judicial el macrismo, desde enterarnos que uno de los jefes de la mesa judicial era “Pepín” Simón, que había sido el artífice de la medida de nombrar por decreto a Rosatti y Rosenkrantz. Y hasta nos enteramos que Fabián Rodríguez Simón fue el que extorsionó a Alejandra Gils Carbó, procuradora general de la Nación, con la amenaza a sus hijas para que renunciara. Y que luego renunció”, señaló Cristina. Y continuó:

“nos enteramos porque lo sufrimos del sistema de espionaje montado entre la AFI y algunos sectores judiciales que permitían que se cablearan los penales para escuchar a abogados con detenidos llamados de la corrupción”.