En el medio de las feroces internas que ya es moneda corriente en Juntos por el Cambio y en particular al PRO a nivel nacional, bonaerense y porteño, y que en las últimas semanas sumó la explosión de diferencias por las candidaturas en todo el país, la Mesa Nacional de la coalición opositora se reunió para intentar encaminar esas dificultades, pero, sobre todo, para generar pánico en la sociedad, advirtiendo que el actual gobierno dejará una bomba de tiempo que le explotará a quien lo suceda.
La reunión se realizó en un restaurante del barrio porteño de Palermo, y duró casi cuatro horas. Una característica central de lo que pasó es que no estuvo presente Mauricio Macri, que retomó sus vacaciones en Cumelén, en Villa La Angostura.
El hecho es que más allá de sus internas, las principales figuras de Jxc le destinó casi toda la primera hora para deliberar sobre la situación económica y la economía que se viene a partir del 10 de diciembre próximo, concepto que empieza a parecerse a lo que ya pasó en el recordado binomio 2015-2016, cuando Macri hablaba de la “pesada herencia”, que llamativamente tenía datos macroeconómicos íntegramente mejores que los que dejó en 2019.
Para esto expusieron los economistas de las principales fundaciones de cada partido, quienes brindaron detalles sobre el programa económico conjunto en el que trabajan hace meses, pero que todavía se desconoce en la opinión pública.
Llamativamente, en el segmento de economía JXC expresó su “preocupación ante la grave situación económica que el Gobierno Nacional le dejará al próximo gobierno que no hace más que perjudicar a los argentinos, a los que condenan a este estancamiento permanente”, y evaluaron en ese sentido que “la situación será mucho peor de la recibida en el 2015”.
“Durante el gobierno de Alberto Fernández, el endeudamiento público tuvo un aumento récord: creció ya en el equivalente a USD 83 mil millones, lo que genera una crisis de financiamiento en pesos que tuvo su epicentro en junio de 2022. Desde entonces, el Banco Central se vio obligado a comprar deuda pública por el equivalente a 2,3% del PIB”, se preocuparon insólitamente por la deuda.
Según argumentaron, “a pesar de la negación del Gobierno, esto ha puesto al país ante un delicado escenario de fragilidad financiera que eleva el riesgo de una salida caótica” y, “en suma, una situación que, lejos de resolver los problemas, intenta irresponsablemente desplazar su impacto al día después de las elecciones”.
Quienes sí estuvieron presentes, entre otros, fueron los precandidatos del PRO, Horacio Rodríguez Larreta – jefe de Gobierno porteño – y Patricia Bullrich, titular de ese partido; la diputada nacional María Eugenia Vidal; Gerardo Morales, gobernador de Jujuy y presidente de la Unión Cívica Radical (UCR); Maximiliano Ferraro, diputado nacional y presidente de la Coalición Cívica (CC): y Miguel Ángel Pichetto, titular de la Auditoría General de la Nación y líder de Encuentro Republicano. Además, se sumaron los gobernadores radicales Rodolfo Suárez (Mendoza) y Gustavo Valdés (Corrientes).
Otro de los ejes centrales fue la tensión que hay por las candidaturas en algunas provincias y para intentar encaminar ese entuerto, lo que hizo la Mesa Nacional es armar otra mesa política para “abordar la situación de las provincias con elecciones desdobladas”. En ese ítem, fue la situación de Mendoza, con su gobernador presente, el tema que más tiempo tomó.
En otro bloque, se trató el pedido de juicio político que el Gobierno impulsa contra los jueces de la Corte Suprema de Justicia de la Nación. Como ya hicieron público, en JxC consensuaron bloquear la agenda parlamentaria de Extraordinarias, es decir decidieron no trabajar, para impedir el avance del proyecto -que se discute en comisión en Diputados- y no dar quórum si llega al recinto, lo cual a la vez vulneraría el resto de las iniciativas que incluyen temáticas de agenda económica, educativa, previsional y sanitaria.
Por último, el documento repudió “la entrega arbitraria, por parte del Estado Nacional, de tierras a supuestos mapuches, que no son originarios del territorio argentino”, en relación con Mendoza, y ratificaron que “esa decisión va a ser dejada sin efecto por un próximo gobierno de Juntos por el Cambio”.