Antes de la implosión final, el PRO postergó hasta mañana la reunión para decidir qué hacer en el balotaje

En medio de una convulsión interna que parece conducir casi inexorablemente a una inminente implosión de Juntos por el Cambio, los principales referentes del PRO cancelaron hasta mañana el encuentro que iban a realizar hoy para analizar el escenario electoral tras la derrota de esa coalición en las elecciones del último domingo.

La postergación se produce en medio del fuerte debate interno en JxC por el lamentable desempeño electoral, y en torno a un eventual apoyo a Javier Milei de cara al balotaje.

En principio, el encuentro iba a realizarse esta mañana en la sede del PRO, en el barrio porteño de San Telmo. Se había anunciado que estarían presentes la ex candidata presidencial Patricia Bullrich, el ex presidente Mauricio Macri, el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y la ex gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal, entre otros.

Al margen de la discusión más profunda sobre si el espacio seguirá unido o se dividirá, la coalición opositora tiene una cuestión más urgente que resolver: definir si brinda su apoyo explícito a Milei o deja a sus votantes en libertad de acción.

El primer espacio de JxC en dar su postura oficial al respecto fue la Coalición Cívica (CC), al anunciar que no respaldará “ni a (Sergio) Massa ni a (Javier) Milei” ya que “proponen gobiernos irresponsables basados en imposibilidades morales y políticas y pacto de impunidad”.

Los debates sobre un eventual apoyo a Milei comenzaron la misma noche de la derrota electoral de las elecciones generales en un contexto en donde también existen discusiones más profundas sobre si el espacio seguirá unido o se dividirá.

El mensaje que lanzó Patricia Bullrich se interpreta como un llamado a sus votantes a no acompañar al candidato de Unión por la Patria.

Un dato no menor: los gobernadores de Juntos por el Cambio definirán mañana si rompen con Mauricio Macri por su intento de volcar al frente opositor en favor de Javier Milei en el ballotage.

Los mandatarios opositores crearon su propia liga, como la que tienen los peronistas oficialistas, para mostrarse como un polo de poder que tome decisiones durante los próximos cuatro años, sea cual sea el destino de JxC tras la derrota.

Entre ellos no hay ninguno de ellos que hasta el momento haya mostrado interés en apoyar públicamente a Milei como pretende Macri, en especial los radicales que se sintieron bastardeados por el libertario durante toda la campaña. Según anticiparon en el entorno de uno de los gobernadores electos, algunos de ellos están planteando iniciar conversaciones con Sergio Massa.

Macri conoce el rechazo que genera su postura de jugar para Milei en Juntos y por eso busca avales en su partido antes de lanzarse públicamente a la aventura, que todavía no blanqueó desde que se conocieron los resultados.

“Nadie la vio venir”, es el comentario que prevalece y envuelve en una autocrítica a casi todos los dirigentes de Juntos por el Cambio. Lo que sí existe, es una coincidencia entre gran parte de las caras más conocidas de la alianza: atribuir a Mauricio Macri la mayor culpa de una debacle electoral que puede terminar con Juntos por el Cambio como coalición.

El único que hasta ahora reconoció ese enojo con el ex presidente en público fue el intendente de Olavarría, Ezequiel Galli, que terminó arrastrado por la caída de todo el espacio y quedó tercero detrás de Unión por la Patria y La Libertad Avanza en su distrito.

“Claramente @mauriciomacri no es más el líder ni el referente de JxC. Argentina eligió, y claramente fue en un sentido opuesto a lo que venimos proponiendo”, fue el mensaje que posteó Galli en la madrugada del lunes, con los resultados de la elección y sin ninguna intención de disimular su bronca y fastidio.

Fue el único dirigente del PRO que habló en público, pero resumió lo que piensan muchos, especialmente vinculados al jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y extendiendo la línea un poco más allá a un sector del radicalismo que siempre fue muy crítico de Macri y que por estas horas analiza seriamente una salida de la coalición: el ala que encarnan Gerardo Morales y Martín Lousteau, presidente y vice del partido y socios de Larreta en su frustrado intento presidencial.

Otro intendente del PRO opinó que el espacio debería dar vía libre para que cada dirigente se exprese de acuerdo a lo que le parezca de cara al balottage. Se trata de Diego Valenzuela, de Tres de Febrero: “Hay un sector de PRO que a toda costa quiere ir en contra del populismo y acompañar a Milei, (pero) nadie nos puede decir a quién votar”.

La reacción del macrismo frente a esas críticas, es contundente, sobre todo con el sector más díscolo de la UCR: “Están puteando para romper Juntos por el Cambio y cerrar su vínculo con Massa, no sólo por el balotaje sino porque tienen serias intenciones de armar ese gobierno de unidad nacional que él viene planteando”, sueltan desde el entorno del ex presidente.