Después del resultado inesperado del oficialismo y en medio de una transición con tensión entre Alberto Fernández y Javier Milei, Cristina Kirchner decidió suspender a último momento su viaje a Italia, programado antes del balotaje.
La vicepresidenta tenía programado viajar al país europeo para participar de una conferencia que se titulaba “La insatisfacción democrática”, en la Universidad Federico II la más importante de Nápoles.
Mientras desde esa casa de estudios habían confirmado que se presentaría el viernes 24 de noviembre, a las 17 (hora italiana) para dar una clase magistral, en el entorno de CFK no dieron a conocer las razones de la suspensión.
“Su presencia en nuestra universidad tendría el significado de fortalecer las relaciones entre los sistemas de educación superior de nuestros dos países y sería perfectamente coherente con la Cátedra de Cultura Argentina llevada adelante en nuestra universidad”, había destacado el rector en una carta enviada a la vicepresidenta, con motivo de su presentación.
En la misma visita a Italia, Cristina Kirchner iba a aprovechar para concretar una audiencia con el papa Francisco, quien no recibía a la vicepresidenta desde el 7 de junio de 2015, cuando todavía era presidenta de la Argentina.