Perón acostumbraba a citar a Mao Tse Tung: “El que lucha contra un compañero es que se ha pasado al bando contrario. Eso lo hemos observado todos, no hay peronista que no haya observado este tipo de disidencia, siempre sospechoso, pero más que nada negativo para el trabajo de conjunto que debemos realizar”.
En el medio de una interna feroz entre algunos sectores del kirchnerismo y La Cámpora por el rol que debe ocupar Cristina, Axel Kicillof y el peronismo en la próxima etapa, la mayoría de los intendentes y el mismo gobernador, no se meten en internas, siguen gestionando y tienen un gran apoyo de la población.
En la última encuesta de CB Consultora Opinión Pública se mide la gestión de los intendentes del Gran Buenos Aires y para sorpresa de la derecha y los medios hegemónicos tienen una imagen positiva muy elevada. El sondeo se basó en un relevamiento de 600 a 698 casos en cada uno de los 24 municipios relevados.
El intendente Leonardo Nardini, de Malvinas Argentinas, quien además fue un gran ministro de Obras públicas en la Provincia, encabeza el rating con la mejor imagen, superando los 70 puntos. Lo sigue Federico Achaval, intendente de Pilar, con el 65,7 por ciento; Fernando Gray, de Esteban Echeverría, con el 64,5%; Mariano Cascallares, de Almirante Brown, con el 62,9%; Juan Andreotti, de San Fernando, con el 61,6%; Mariel Fernández, de Moreno, con el 61,4%; Jorge Ferraresi, de Avellaneda, con el 61,2%, Juan José Mussi, de Berazategui, con el 60,9%; Mayra Mendoza, de Quilmes, con el 59,5%; Julio Zamora, de Tigre, con el 57,0%; Andrés Watson, de Florencio Varela, con el 52,9%; Federico Otermín, de Lomas de Zamora, con el 49,1%, Lucas Ghi, de Morón, con el 48,5%; Pablo Descalzo, de Ituzaingó, con el 48,0%; Damián Selci, de Hurlingham, con el 47,1%; Fernando Espinoza, de La Matanza, con el 46,1%; Mario Ishii, de José C. Paz, con el 42,4%. Solamente Julián Álvarez, de Lanús, y Gustavo Menéndez, de Merlo, están debajo de los 40 puntos. Álvarez con 39,2% y Menéndez con el 37,9%.
Los números de la CB consultora demuestran que los jefes comunales del peronismo gestionan bien, no se meten en tempranas internas y la gente les responde positivamente.
El gobernador Axel Kicillof mantiene silencio en la interna de La Cámpora con el ministro Andrés Larroque y los dirigentes Jorge Ferraresi y Mario Secco. Es lo que hay que hacer. Recordemos una vez más al general Perón cuando analizaba el rol de conductor: “La conducción debe ejercer sobre todas las fuerzas -sin violencia- su acción persuasiva, que es lo que trato de hacer yo. Es decir, que el que conduce el conjunto debe ser una suerte de Padre Eterno que bendice urbi et orbe, e influencia a todos para que esa bendición los alcance en forma de encaminarlos hacia el objetivo, y desviarlos de los objetivos sospechosos que sostienen intereses parciales…”