La sobreactuación de Javier Milei para salir en defensa de la cada vez más cuestionada Sandra Pettovello, puede tener un alto costo político, teniendo en cuenta que ya no son pocos, dentro del propio Gobierno, quienes no descartan que la ministra de Capital Humano tendría los días contados al frente de esa cartera.
Nunca, en estos casi seis meses de gestión, el presidente tuvo tanta necesidad de mostrarse activo y de respaldar a una funcionaria de su riñón como ocurre con Pettovello, protagonista principal del escándalo en torno a la entrega de alimentos y las contrataciones bajo sospecha realizadas desde su cartera a través de la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI).
Precisamente, la justicia investigará un giro de $6.772.500.000 del Ministerio de Capital Humano a ese organismo, relacionada con la compra de botellas de aceite y paquetes de lentejas, libre de controles locales como el de la Auditoría General de la Nación y de la Sindicatura, y con supuestas irregularidades, no sería el único problema.
Se trata de una nueva denuncia en la que se cuestionan los mecanismos de compra de alimentos por parte del ministerio de Capital Humano, y que se suma a las otras con escándalo de sobresueldos incluido, admitidos por la misma cartera.
Una compra del Estado que supere los $2.700.000.000 necesita la firma del jefe de Gabinete, por ese entonces Nicolás Posse. Sin embargo, la resolución fue firmada solamente por la ministra Pettovello el 6 de marzo último.
“Es la mejor ministra de la historia”, exageró ayer Milei en una inusual, pero premeditada conferencia de prensa en Casa Rosada, el tercer gesto del mandatario desde el fin de semana en defensa de la ministra para tratar de encapsular la polémica que ya investiga la Justicia.
En otras palabras, quedó demostrado que el presidente está decidido a tirarse encima de la granada que golpea a Pettovello. En los últimos días se comenta que a la funcionaria la vieron más nerviosa que de costumbre. Milei la defiende a capa y espada, y teme que termine renunciando desbordada por el escándalo.
La nueva denuncia fue realizada por el abogado Leonardo Martínez Herrero que días atrás hizo otra presentación para que se investigue una supuesta asociación ilícita, cohecho y malversación de caudales.
Lo que se sabe, según la denuncia, es que se adjudicó a distintas empresas, a través de la OEI, la compra de aceite y lentejas y están en trámite otros procesos de licitación. Pagó por el momento un total de $3.651.940.197.
“Se tercerizó la compra de alimentos por medio de la OEI, que no está sujeta a controles o auditorias por parte del Estado Argentino, y se transfirió un pago por una suma de dinero en violación a la Comunicación General que dictó la Jefatura de Gabinete, excediéndose de los límites que contempla la normativa habiendo incurrido así, al no haber firmado el Jefe de Gabinete, en incumplimiento de los deberes de funcionario público”, advierte la denuncia.
Además, el letrado deslizó que los precios serían superiores a los valores de mercado, por lo que pidió el inicio de la investigación penal.
Mientras tanto, ayer, en medio del escándalo de la distribución de alimentos y el pago de sobresueldos en el Ministerio de Capital Humano, Pettovello faltó a la reunión de gabinete, y agitó las versiones de un enfrentamiento con Karina Milei.
La funcionaria fue la única ausente de la reunión que volvió a encabezar Javier Milei después de varias semanas. El presidente había dejado de participar de los encuentros porque no quería cruzarse con Nicolás Posse. Ya con Guillermo Francos como jefe de gabinete, Milei volvió y hasta avaló que se difunda una foto, algo que no ocurría hace al menos dos meses.
La ausencia de Pettovello resultó más que sugestiva, porque se dió después de dos días de un fuerte esfuerzo de Milei para respaldarla. El presidente la apoyó por Twitter, mandó a todos sus ministros a hacerlo, fue hasta sus oficinas a verla y difundió una foto con un abrazo efusivo durante la asunción de Francos.