El frio polar que sufre la Argentina obliga a los hogares a utilizar más gas y luz para calefaccionarse. Más allá que el gobierno había dicho que frenó los aumentos masivos, la realidad es que están viniendo boletas con cifras exorbitantes.
Según el gobierno había decidido bajar los topes de consumo subsidiado de luz y gas que tendrían los usuarios residenciales de ingresos bajos (N2) y medios (N3), por lo que se esperaban fuertes aumentos en las boletas.
Como se sabe, los usuarios de ingresos altos (N1) pagarán el 100% del costo de la electricidad. Mientras que los de ingresos bajos (N2) y los de ingresos medios (N3) tendrán una bonificación del 71,9% y del 55,9% sobre ese precio en la factura, respectivamente.
Según estimó la Secretaría de Energía, los incrementos para un consumo promedio residencial de 260 KWh serán:
Ingresos altos (N1): aumentará un 23%, de $24.710 a $30.355
Ingresos bajos (N2): tendrá una suba del 100%, de $6295 a $12.545
Ingresos medios (N3): tendrán subas del 156%, de $6585 a $16.850.
Más allá de esos datos técnicos, las boletas están llegando con aumentos brutales. En una nota muy interesante del diario El Día de La Plata, los datos que muestran son muy duros. Un vecino de Gonnet que abonó por la boleta de gas de junio un monto de 20.348,66 pesos, esta vez se sorprendió porque le llegó una factura por 92.919,71 pesos.
Otro usuario de City Bell que el mes pasado desembolsó 9 mil pesos y ahora tendrá que abonar un costo del servicio de 35 mil pesos. Como en el caso anterior, en este el consumo se elevó significativamente pasando de 37 metros cúbicos a 293.
En tanto, Carlos, un jubilado del barrio El Mondongo, afirmó que en junio pagó 3.750 pesos y ahora le vino un monto de 21.700 pesos. “Tengo subsidio como jubilado y este número me parece un abuso total. Si la jubilación subiera en la misma proporción no habría problema”, lamentó.
A partir de la información oficial se esperaba que las boletas de la prestataria Camuzzi aumentaran 299 por ciento a los usuarios N1 (ingresos altos), 604 por ciento a las familias del segmento N2 (ingresos bajos), y 367 por ciento para la categoría N3 (ingresos medios).
Una vecina de City Bell señaló que, en relación al servicio de luz, pasó de pagar 55 mil pesos a 120 mil pesos. “Fue un dolor de cabeza cuando vi la factura”, dijo la mujer. A su vez otro usuario de Gonnet tuvo de un mes a otro un salto de 57 mil pesos a 108 mil pesos.
En el caso de usuarios N1 bajo la órbita de EDELAP y con un consumo de 150 KWh/mes, incluidos los impuestos, si en marzo pagó una factura de 22.936 mil pesos por junio tuvo que abonar 26.634 mil pesos.
Siguiendo con el mismo ejemplo de cantidad de consumo, los usuarios N2 si en marzo la luz les costó 8.133 pesos, en junio salió 13.695 pesos.
Finalmente, quienes estén dentro de la franja N3, por los 150 KWh/mes, y que en marzo pagaron una boleta de 8.322 pesos, por el mismo consumo en junio tuvieron que afrontar un gasto de 16.740 pesos.