El gobierno de Javier Milei le acaba de dar otro durísimo golpe al movimiento estudiantil: ahora anunció la eliminación del fondo fiduciario que sostenía Progresar, el sistema de becas que permite que miles de estudiantes puedan mantener sus cursadas en distintos niveles.
Como si se tratara de una represalia por las masivas movilizaciones en defensa de la educación pública y de las universidades, no es casual que esta medida se adopte en el pico de tensión entre la comunidad educativa y la administración de La Libertad Avanza (LLA) y el PRO, que en las últimas horas creció con actividades de resistencia con tomas de facultades y declaraciones públicas que dejan sin argumentos al gobierno nacional en su campaña de descrédito contra las casas de altos estudios.
Hay que tener en cuenta que la eliminación de los fondos fue posible por el poder que la Ley Bases le otorgó al Poder Ejecutivo. El texto que se conoció esta mañana, fue firmado por Milei, el ministro de Economía, Luis Caputo, y el jefe de Gabinete, Guillermo Francos. Al dar de baja el fondo fiduciario Progresar, se argumenta que “nunca se encontró operativo, por no haberse integrado los bienes necesarios para su funcionamiento”.
El Fondo Fiduciario Progresar había sido creado el 28 de enero de 2022, con la finalidad de “financiar líneas de acción orientadas a complementar y potenciar las acciones vigentes” del Programa de Respaldo a Estudiantes Argentinos (Progresar), según consta en el Decreto 57/2022, con el que fue anunciado.
Las becas Progresar buscan acompañar económicamente con un monto de $35.000 a los jóvenes de entre 16 y 24 años para que puedan finalizar la educación obligatoria, estudiar en el nivel superior o formarse profesionalmente.
El Fondo era financiado por recursos surgidos del Aporte Solidario y Extraordinario establecido por Ley N° 27.605, que tenía el objetivo de “morigerar los efectos de la pandemia”. Para las Becas Progresar era destinado un 20 % de ese aporte solidario, que consistía en “un gravamen excepcional y extraordinario por única vez” a los grandes patrimonios de las personas humanas y sucesiones indivisas cuyo valor total de bienes superara los $ 200.000.000.
Desde el ministerio de Capital Humano aclararon que las becas “continúan en vigencia”, y que “el más de millón de beneficiarios seguirán cobrando en tiempo y forma”. “En nada afecta la disolución del Fondo Fiduciario puesto que dicho Fondo nunca fue constituido como tal y el financiamiento de las Becas Progresar tiene su origen en el presupuesto del entonces Ministerio de Educación, hoy Secretaría de Educación del Ministerio de Capital Humano”, señalaron desde la cartera de Sandra Pettovello.