La senadora nacional de Unión por la Patria (UxP), Juliana Di Tullio, presentó una solicitud de acceso a la información pública para que la Secretaría General de la Presidencia de la Nación entregue las filmaciones de las intervenciones del presidente Javier Milei en la reciente cumbre del G20 en Río de Janeiro.
El pedido responde a la advertencia del presidente de Colombia, Gustavo Petro, en cuanto a que se peleó con su par argentino, mientras que la delegación de nuestro país “escondió” las imágenes. Así, podrían confirmarse las versiones de que Milei cruzó a los mandatarios de Brasil, Colombia y Chile porque no lo aplaudieron.
La versión que dio a conocer El Destape es que, durante el plenario, el jefe de Estado argentino se molestó porque su discurso, donde dijo que “el consenso internacional se convierte en corset que asfixia” y apuntó contra la comunidad internacional, no recibió los aplausos de rigor que sí hicieron al final de cada una de las participaciones de los otros presidentes. Sólo los aplaudieron unos pocos funcionarios de la delegación argentina.
El medio aseguró que hubo un “ataque de locura” de Milei en el G20, que incluyó un altercado con el presidente Petro, y la aparente intervención de Lula Da Silva. Ante lo que el jefe de Estado tomó un posteo del ex titular del Senado Federico Pinedo para desmentir el hecho: “¡Cómo mienten! Mentira total y absoluta. Javier Milei ni siquiera estaba cuando habló el presidente colombiano”.
Además, desde su cuenta, el presidente tildó a quienes divulgaron la noticia de “grandes mentirosos y farsantes”, y chicaneó al Foro de Periodismo Argentino: “FOPEA, frente a periodistas tan mentirosos ¿se les puede decir que son mentirosos? ¿Eso sería un ataque a la libertad de expresión? La realidad es que la gran mayoría son grandes mentirosos y farsantes. Por suerte hay testigos que demuestran que sus bocas mienten. CIAO!”.
El periodista Sebastián Lantos reveló que a”después de que Petro decidiera responderle de forma directa durante su alocución, el presidente argentino comenzó una diatriba en la que también apuntó contra Boric, que hasta ese momento no había intervenido en la discusión. Ante la mirada incrédula de otros mandatarios, los descalificó en un tono más acorde a los paneles de TV que solía frecuentar que a una cumbre de líderes globales”.
Pero el conflicto fue confirmado por el propio presidente de Colombia, por la vocera del gobierno de Chile y, off the record, por la diplomacia brasileña. “La delegación argentina, a la cual le entregan los videos de su intervención, la escondió, no la publicó. Algo no les gustó de lo que pasó allí”, sostuvo Petro sobre el conflicto.
También se refirió a ese episodio la secretaria general del gobierno chileno, Camila Vallejos: “Yo estuve en los tres foros del G20 y son instancias de diálogo y no de confrontación porque se expresan posiciones, pero siempre se respetan evidentemente las de los otros países”, apuntó en una conferencia de prensa en la que le preguntaron por el episodio.
Lo cierto es que las intervenciones de los mandatarios son registradas únicamente por la organización del evento, tras lo que cada país puede disponer de las imágenes que corresponden a la intervención de su representante y decidir si difundirlas o no, y la forma de hacerlo.
En el gobierno argentino aseguran que ese video no existe, a pesar de que otros mandatarios que participaron de la cumbre ya dieron a conocer sus respectivos discursos. Todavía no se conoce qué hicieron en Casa Rosada con el discurso de Milei, y por ahora quedará esperar a que desde Presidencia le den una respuesta a la senadora Di Tullio.
Hasta tanto el Gobierno no muestre las imágenes o exista una filtración, hay más elementos que dan sustento a la versión de la agresión escandalosa. Por ejemplo: la ausencia de Milei en la foto de familia que reúne a todos los asistentes a la cumbre y de la que no participó. En la Casa Rosada dijeron que no llegó por la bilateral con la titular del FMI, Kristalina Georgieva, pero ella aparece en la primera fila del retrato colectivo.