Cientos de vecinas y vecinos de La Matanza participaron de una emotiva misa en la explanada de la Catedral de los Santos Justo y Pastor, en San Justo, en memoria del Papa Francisco, quien falleciera el pasado lunes. La ceremonia religiosa fue oficiada por el Obispo Eduardo García, acompañado por sacerdotes de distintas iglesias y parroquias del distrito, y contó con la presencia del intendente Fernando Espinoza.
Durante la tarde noche del martes, toda la comunidad de La Matanza, unida, se acercó a la Catedral de San Justo a homenajear al Papa argentino, el primero en la historia, Francisco. Junto al intendente de La Matanza y presidente de la Federación Argentina de Municipios, Fernando Espinoza, estuvieron representantes del Gabinete local y del Honorable Concejo Deliberante, legisladores locales; la comunidad educativa y las fuerzas vivas del distrito.
Durante la ceremonia, el Obispo Eduardo García dijo en varias oportunidades de la misa “tenemos un gran sentimiento de orfandad” y destacó el legado transformador del Santo Padre y su mirada profundamente humana y solidaria sobre la Iglesia y el mundo. Francisco, que marcó una etapa única en la historia de la Iglesia católica, será recordado por su profunda vocación por una “Iglesia en salida”, su compromiso con los pobres y descartados, y su impulso por el diálogo interreligioso y la paz mundial.
Al finalizar la misa, el intendente Fernando Espinoza recordó: “A través de su papado, nuestro querido Francisco dejó tres pilares que marcaron su misión pastoral: Una Iglesia cercana y en salida, que abandona los privilegios para caminar junto a su pueblo; la opción por los pobres y excluidos, poniéndolos en el centro de la acción pastoral; y el compromiso por la paz y el cuidado de la Creación, abogando por un mundo más justo y sustentable, nuestra casa común”, y agregó: “Hoy nos invade la emoción pero también el compromiso por, desde el lugar que nos toca, mantener vivo su legado; trabajar fuerte por los más vulnerables y en completa unidad, para que el amor y la bondad ocupe un espacio más grande en el corazón de todas las argentinas y argentinos”.
La comunidad de La Matanza, profundamente ligada al mensaje de justicia social que Francisco encarnó, se congregó en unidad, fe y reflexión para rendir tributo a quien supo representar la esperanza de los más humildes.