Tras la confirmación de la alianza entre La Libertad Avanza y el PRO para competir en la provincia de Buenos Aires, el diputado José Luis Espert lanzó una serie de declaraciones explosivas, que incluyeron insultos al peronismo, amenazas de represión, y un ataque directo a la educación pública.
Como era previsible, la derecha no tardó en sellar su unidad. La reunión entre Cristian Ritondo, Diego Santilli, Karina Milei y Sebastián Pareja formalizó el acuerdo. También participaron Martín Menem —presidente de la Cámara de Diputados— y Eduardo “Lule” Menem, operador clave del oficialismo.
Al salir del encuentro, Ritondo fue claro: “Queremos sacar al populismo de la provincia de Buenos Aires en septiembre y que, en octubre, los diputados que asuman por nuestra lista acompañen sin condiciones el proyecto nacional.”
Un frente “antikirchnerista” con motosierra y bala
Aunque Espert no participó de la reunión, opinó al día siguiente: “Vamos a crear un gran frente antikirchnerista”, dijo, y tildó de “impresentables” y “plagas” a los dirigentes peronistas que gobiernan la provincia.
El diputado libertario —que encabezará la lista de legisladores nacionales por pedido expreso del presidente Milei— fue más allá. Arremetió contra el gobernador Axel Kicillof, afirmando que, de llegar al poder, la consigna será “cárcel o bala”, y que se acabó la “puerta giratoria” en la Justicia.
Ataque a la educación y a los trabajadores
Uno de los pasajes más polémicos fue su promesa de “detonar el Ministerio de Educación”: “Vamos a terminar con ese centro de alucinación progre. Que vuelva a enseñar Matemática, Lengua, Geografía, Educación Cívica.”
También arremetió contra IOMA, la obra social de la provincia: “Está destruida por culpa de los impresentables que la manejan. Tiene que estar en manos de profesionales de la salud, no de sindicalistas.”
Propuestas de shock fiscal
En clave fiscal, Espert planteó eliminar impuestos provinciales y avanzar hacia una “autonomía municipal” que permitiría a los intendentes recaudar sus propios tributos en lugar de depender de ARBA: “Los bonaerenses somos esclavos impositivos de Kicillof. Hay que aplicar motosierra más hacha. Si estamos de acuerdo en estas cosas y en detestar al kirchnerismo, vamos todos juntos.”
Golpe a ARBA y amenaza al federalismo fiscal
Finalmente, anunció una ruptura total con ARBA y los sistemas de cooperación fiscal con la Nación: “Desde hoy, todos los convenios de intercambio de información entre Nación y Provincia quedan dados de baja.”
Y agregó: “Solo firmaremos convenios con provincias que respeten el decreto presidencial: nadie se mete con el consumo ni con los incrementos patrimoniales. Si una provincia quiere seguir controlando la vida de la gente, no tendrá acceso a la base de datos nacional. Punto.”