El gobernador bonaerense destacó el encuentro del PJ bonaerense en Merlo de cara a las elecciones legislativas en la provincia de Buenos Aires y pidió “dejar las diferencias para después y organizar la protección del pueblo bonaerense”.
En una publicación en su cuenta de la red social X, Kicillof destacó las resoluciones del PJ bonaerense tras un encuentro que se produjo el fin de semana. “Ayer, el Congreso del PJ bonaerense dio un paso importantísimo: colectivamente se acordó consolidar un gran frente que, en las próximas elecciones legislativas, funcione como escudo y ponga un freno a la motosierra que hoy arrasa derechos y sueños en nuestra provincia y en toda la Argentina”, marcó.
“Sabemos que dentro del peronismo existen miradas distintas sobre la experiencia fallida del Gobierno Nacional del FdT y sobre el camino a seguir para reparar aquella decepción. Esos debates continuarán: son inevitables y necesarios. Sin embargo, hoy existe una urgencia que supera cualquier diferencia o disputa: en cada caminata, en cada recorrido, en cada plenario, militantes, trabajadores y vecinos nos piden lo mismo a los dirigentes: vayan juntos. La motosierra se está volviendo cada vez más despiadada y el autoritarismo de Milei dejó de ser solo un discurso para convertirse en una durísima realidad. La lista es larga y oscura: persecución de militantes, salvaje represión en las protestas, acoso sobre quienes critican, demonización de periodistas, condena a Cristina Kirchner, ataque permanente desde el Estado a las mujeres y a las disidencias.
Continuó: “Mientras tanto, el plan económico agudiza la desigualdad, multiplica las privaciones, aumenta el desempleo y castiga los pilares de nuestra Provincia: la producción y el trabajo. Un Gobierno Nacional que deserta de sus obligaciones, un presidente que avanza en el desenfreno autoritario, la economía parada y la plata no alcanza. Esas son las circunstancias que debemos enfrentar. Durante la campaña de 2023 advertimos que la derecha tenía distintos candidatos pero un solo proyecto: ajustar y quitar derechos. Tristemente, teníamos razón. La Libertad Avanza y el PRO forman parte del mismo proceso de crueldad y desintegración que está padeciendo el país. Desde el Gobierno de la Provincia actuamos cotidianamente como escudo y red para atenuar el daño a través de políticas alimentarias, educativas y sanitarias, sosteniendo la obra pública y multiplicando los esfuerzos frente a la deserción del Gobierno Nacional. Ahora bien, lo cierto es que si Milei ganara tendrá menos inhibiciones y obstáculos para ir por más, por más desempleo, por más odio y por más motosierra. A ese plan de la derecha tenemos que ponerle límites firmes. Dada la gravedad y la importancia de lo que está en juego, como gobernador de la Provincia de Buenos Aires vuelvo a convocar a cada compañera y compañero, a cada sindicato, a los movimientos sociales, a cada intendente y a cada dirigente del campo popular a dejar las diferencias para después y organizar la protección del pueblo bonaerense. Expreso esta convocatoria estando a cargo del gobierno de una provincia que sufrió recientemente una insólita amenaza de intervención por parte de un presidente que no la conoce, que no la recorre y cuyos intereses ataca. Mientras el presidente se propone fundir a las provincias y municipios que cada vez atienden más necesidades – y sin cuya tarea la situación social sería aún mucho más delicada – se impone el desafío de coordinar esfuerzos para seguir protegiendo al pueblo bonaerenses, a sus escuelas, sus hospitales y sus actividades productivas. Frente a la doctrina del “sálvese quien pueda” que nos quieren imponer, la historia, y sobre todo el futuro, nos exigen una tarea: sumar fuerzas para frenar a Milei, sumar fuerzas para proteger al pueblo bonaerense. Esta defensa de nuestra provincia es el primer paso para el verdadero desafío: construir un frente social y político lo más amplio posible a través del cual podamos recuperar nuestro derecho al futuro y, en el 2027, poner al país en un camino de desarrollo justo, soberano y federal. No estamos condenados a la pesadilla libertaria, hay otro camino y lo seguiremos construyendo”.