20.4 C
La Plata
10 septiembre, 2025
PRINCIPALES

Milei juega al cambio trucho: pone a Catalán en Interior pero prepara una lluvia de vetos

Un presidente acorralado por la paliza electoral del domingo frente al peronismo en la provincia de Buenos Aires y temeroso de que sus “gobernadores amigos” le suelten la mano, decidió nombrar a Lisandro Catalán como nuevo ministro del Interior para intentar reactivar el diálogo con las provincias.

La decisión fue oficializada esta mañana por el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, luego de una reunión encabezada por Javier Milei en la que también participó el ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo.

“Siguiendo las instrucciones del Presidente, con el objetivo de retomar el diálogo con los gobernadores afines, hemos constituido la Mesa Federal junto al ministro de Economía, Luis Caputo, y al flamante ministro del Interior, Lisandro Catalán”, anunció Francos.

En el comunicado se insistió en que, en esta “nueva etapa”, el Gobierno considera imprescindible implementar las reformas estructurales en las que viene trabajando, y que está dispuesto a profundizar los vínculos con las provincias que compartan “el espíritu de cambio”.

Veto tras veto

En paralelo, Milei ratificó que su estilo no se negocia: vetará la emergencia pediátrica en el hospital Garrahan y el presupuesto para las universidades nacionales. Además, está en carpeta el veto a la coparticipación de los Aportes Nacionales del Tesoro (ATN), sancionada por el Congreso a pedido de las provincias, justo cuando la Casa Rosada busca convocar a los gobernadores a un supuesto “diálogo federal”.

El Presidente tiene plazo hasta este jueves para firmar los vetos, cuando se cumplen los diez días hábiles desde la sanción de las leyes. La única excepción sería la norma sobre discapacidad, que el Gobierno no judicializaría.

El desembarco de Catalán en el Interior no cambia la esencia del Gobierno: Milei sigue jugando a la confrontación mientras habla de diálogo. Cambia nombres, cambia discursos, pero la estrategia es la misma: gobernar a puro veto. Y en la Argentina, cuando un presidente se aferra al látigo en vez de tender la mano, la caída suele llegar más rápido de lo que imagina.

 

También en info135

Karina acorralada: citada al Congreso, demolida por las encuestas y rebautizada “tres por ciento”

Alfredo Silletta

Salir de los comentarios