Por Alfredo Silleta. Ya hemos afirmado en este medio que “la desesperación es mala consejera”, pero desde la Casa Rosada pareciera no percibirlo. Se hicieron los “tontos” con la prisión ilegal de Milagro Sala y las Naciones Unidas le exigieron que cumpla con la inmediata liberación. Ayer el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, incorporó el tema en la charla con el presidente Mauricio Macri y se espera una respuesta por estas horas desde el gobierno nacional.
Hoy habrá una gigantesca movilización de los movimientos sociales y la CGT frente al Congreso de la Nación para presionar a las autoridades de la Cámara de Diputados que permitan tratar el proyecto de Ley de Emergencia Social, que el pasado miércoles fue aprobado por todos los sectores del Senado, menos por Cambiemos. El gobierno ya afirmó que harán todo lo posible para postergar su tratamiento hasta marzo o abril y en caso que salga este año será vetada por el Ejecutivo.
Desde los movimientos sociales, Emilio Pérsico del Movimiento Evita ya respondió que si se cae la ley van a cortar los puentes. “Si la vetan será una locura y habrá una respuesta muy contundente. No nos asusta pasar Navidad en el puente Pueyrredón”. Desde la CGT también le respondieron que antes que vetar la ley “lo piensen dos veces”.
La desesperación, decíamos, es mala consejera, pero al observar que llevan 10 meses consecutivos con baja en todos los indicadores económicos, con una situación difícil en la sociedad, con el consumo parado, y ante los peligros de conflictividad social hacia fin de año, el gobierno aumentó la persecución político-jurídica contra la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner. El ataque es claro: si sos candidata el próximo año vamos por tu madre, tus hijos y si es necesario tus nietos. Un ataque mafioso.
Todas las encuestas dicen que hoy por hoy la ex presidenta gana ampliamente las elecciones en la provincia de Buenos aires y desde Cambiemos ya afirmaron que “no aceptarán” un triunfo del peronismo, mucho menos si Cristina encabeza la lista.
El ex juez de la Corte, Eugenio Zaffaroni, afirmó que en el país se “está viviendo un revanchismo como en 1955 con procedimientos mafiosos nunca vistos en democracia”. Luego agregó: “No existen los resguardos jurídicos y no confió en este Poder Judicial que esta partidizado”.
El odio hacia la ex presidenta se refleja en los medios dominantes que operan para el gobierno. El pequeño Feinmann ayer estaba desatado -en sí está desatado desde hace meses- escribió varios tuits pidiendo que la ex presidenta “toque el pianito como una delincuente” y Margarita Stolbizer afirmó que “por la salud de Argentina no sería bueno que Cristina pueda ser candidata” y reiteró que en “la calle le piden que cárcel ya para la ex mandataria”.
El gobierno de Macri todavía no cumplió un año y la situación social cada día es más dramática. Los medios dominantes seguirán escribiéndole el “Diario de Yrigoyen” pero un día la realidad, como el bosque no podrá ser tapado por un árbol.