Por Alfredo Silletta. Fue un fin de semana recargado, con demasiadas declaraciones altisonantes. Desde la desesperación de Cambiemos por bajar la candidatura de Elisa Carrió, Margarita Stolbizer que le marca la cancha a Sergio Massa y dirigentes del peronismo que quieren bajar a Cristina cuando si se los mide no figuran en ninguna encuesta.
En Cambiemos están preocupados porque ya están terceros en la provincia de Buenos Aries y lo que es peor no tienen candidatos. Ni Jorge Macri ni Facundo Manes miden y sólo cuenta con Elisa Carrió que tiene un alto conocimiento y respeto en los votantes del oficialismo. El problema es Vidal que no la quiere de candidata por Buenos Aires. De allí que hace dos semanas fue junto a Horacio Rodríguez Larreta a su casa de Exaltación de la Cruz para tantearla si quiere ir por la ciudad.
El problema de Vidal es que con Carrió de candidata ella pasaría a un segundo plano y la campaña se convertiría en una denuncia tras otra contra el peronismo, el massismo y, obviamente, también contra algunos funcionarios de la Gobernación. Vidal quisiera que la campaña fuera a su estilo, sin gritar, sin grandes denuncias, mostrando la sonrisa simpre.
Carrió quiere competir contra Cristina y con Massa. Cree que es la única que lo puede hacer. En eso Macri está más cerca de Carrió como candidata que de Vidal, que si fuera por ella ya hubiera lanzado formalmente a Jorge Macri y Facundo Manes, pero en Cambiemos la lapicera la tiene el presidente.
El segundo hecho del fin de semana fueron las declaraciones de Margarita Stolbizer cuando afirmó que ella será candidata a senadora o a nada. “Si soy candidata es por el GEN y el Frente Progresista, que discutirá en abril su política de alianzas. Pero no sé todavía si voy a ser o no”. En realidad, Stolbizer sabe que sóla no mide más de uno o dos puntos, con lo cual sería el final de su partido y de los pocos que la acompañan. Massa, obviamente no le respondió porque la necesita desesperadamente para tener un escudo si la candidata es Carrió, quien no duda de calificarlo como cercano al narcotráfico. Por otro lado, el tigrense sabe que tenerla cerca a Stolbizer le complica su sueño de acercar intendentes peronistas que hoy por hoy mantienen la unidad dentro del peronismo.
Finalmente, Julián Domínguez que perdió en su propio municipio el año pasado, salió a afirmar que “lo mejor que nos puede pasar es que Cristina no sea candidata. Creo que hay etapas concluidas en la política electoral”. Coincidió con Miguel Ángel Pichetto, otro que perdió por paliza las elecciones para gobernador en Río Negro, quien sostuvo que “es altamente negativo” que un político que fue presidente aspire a un nuevo cargo. Domínguez además planteó que la “renovación” está en Florencio Randazzo.
El problema de algunos dirigentes del peronismo es que luego de un año no han presentado una sola propuesta para enfrentar al oficialismo, más bien le votaron muchas leyes. Hoy por hoy, solo la ex mandataria aparece con un mensaje claro y contundente de oposición a las políticas de ajuste. En todas las encuetas la gente identifica a Cristina como oposición y en las próximas elecciones se votará quienes están a favor de las políticas de Macri y quienes se oponen.