El Jefe de Gabinete Marcos Peña comenzó el año mostrando todo su poder, luego que el presidente Mauricio Macri lo elogiara en diciembre diciendo que él junto a Mario Quintana y Gustavo Lopetegui “son mis ojos y mi inteligencia cuando ellos piden algo lo estoy pidiendo yo”.
A fines de diciembre le pidió la renuncia al ministro de Economía, Alfonso Prat-Gay, y ahora a Carlos Melconian, presidente del Banco Nación, y a Daniel Chaín, secretario de Obras Publicas de la Nación.
El trio comandado por Peña, Lopetegui y Quintana han decidido promover gente de su entera confianza y que dependan exclusivamente de ellos, sin vuelo propio. Así lo hicieron con Nicolás Dujovne y ahora nombraron a Javier González Fraga, quien fue en su momento presidente del Banco Central con Carlos Menem.
Melconian venia marcando diferencias al cuestionar al equipo económico por las políticas de endeudamiento y por no reducir el déficit fiscal. En diciembre el Tesoro le pidió ayuda al Nación para cerrar las cuentas pero Melconian intentó oponerse y finalmente la entidad le entrego 70 mil millones al Ejecutivo. Fue la gota que rebalsó el vaso para Peña que, igual que el presidente, no acepta un no.
González Fraga fue el economista que en mayo del año pasado afirmó que
“Las cosas no se pueden hacer como uno querría y menos después de 12 años en los que se invirtió mal, se alentó el sobreconsumo, se atrasaron las tarifas y se atrasó el tipo de cambio; donde le hiciste creer a un empleado medio que su sueldo medio servía para comprar celulares, plasmas, autos, motos e irse al exterior”.
Otras frases polémicas del economista:
-“Me gustaría saber qué tan pobres son los pobres.”
– “Nadie quiere invertir en el país porque no saben si no vuelve el populismo dentro de dos años.”
-“El país no va a crecer como para permitirte gastar más en comida y más en energía, como combustible y gas, y que mantengas tus gastos de ropa, de entretenimiento y de salidas. No puede ser. Tenemos que enfrentar esa realidad.”
El problema no son los hombres sino la política económica implementada por el gobierno nacional, ya no sólo cuestionada por los trabajadores y la clase media, sino también por los empresarios que financiaron la campaña. En estas horas se conocieron declaraciones del presidente de Swiss Medical, Claudio Belocopitt, que había donado más de 124 millones a la campaña electoral, cuestionando duramente al presidente Macri. “En el 2015 nos fue muy bien, todo lo contrario de lo que nosotros podíamos suponer. Y vaya paradoja, el 2016 ha sido un año muy difícil. No ha sido el año que los argentinos esperábamos tener”, confesó Belocopitt en diálogo con los altos ejecutivos de su firma.