En pocas horas comenzará el mes de marzo y hay preocupación en la casa Rosada. La situación es cada día más complicada, con una económica que sigue estancada y con los gremios decididos a no aceptar una paritaria del 18% en cuatro veces. Hasta el mismo diario Clarín reconoce que las últimas reuniones de ministros y funcionarios han terminado a los gritos. Se cuidan que esas peleas no sean adelante del presidente.
Marzo, el tercer mes del calendario gregoriano, deriva de Martius, el primer mes del calendario romano, que a su vez deriva de Mars, el nombre latino de Marte, dios romano de la guerra. Es el mes que los trabajadores han decidido salir a la calle a decirle basta a las políticas de hambre del gobierno nacional.
El 6 y 7 habrá Paro Nacional Docente, en reclamo del cumplimiento de la ley de Paritaria Nacional Docente y en defensa de la educación pública. Paro apoyado por la mayoría de los trabajadores, más allá de las campañas de trolls que difunde el macrismo.
El 7 de marzo habrá una masiva movilización de la CGT al ministerio de Industria en defensa del trabajo y la industria nacional. La marcha será acompañada por los movimientos sociales y el peronismo en su conjunto. La ex presidenta Cristina Kirchner pidió que no se movilicen a Comodoro Py, donde fue citada por el juez Claudio Bonadío, sino que marchen junto a los trabajadores.
El 8, las mujeres participarán del Paro Internacional de Mujeres para que no haya “ni una Menos”, sino más educación trabajo y salud para todas las mujeres. Entre las 13 y 14 horas habrá un paro activo, con asambleas en los lugares de trabajo. Muchos de los grupos de mujeres pedirán por la libertad de Milagro Sala, presa política del gobernador Morales.
En la segunda quincena de marzo, la CGT llamará a un paro nacional de actividades.
Finalmente, el 24 de marzo, miles y miles de argentinos irán a la Plaza de Mayo para recordar el golpe de estado del 24 de marzo, junto a las madres, abuelas y organismos de derechos humanos, bajo la consigna de Memoria, Verdad y Justicia.
Desde el gobierno y los medios hegemónicos saldrán a “denunciar” un intento de “desestabilización” de la oposición al gobierno nacional. El presidente salió ayer a decir que “todos los días, el país está un poco mejor”. Claro, la mayoría de los argentinos, especialmente los trabajadores, soportan todos los días aumentos en los precios de los alimentos, de transporte, de luz, de nafta, de agua, de peaje, cierre de comercios, de Pymes y flexibilización laboral. Todo esto sumado a los escándalos del Correo Argentino, a las coimas de la constructora brasileña Obebrecht con el amigo del presidente, Gustavo Arribas, y ahora con su primo Ángelo Calcaterra.