La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, aseguro que el examen negativo de ADN de Santiago Maldonado en camionetas de Gendarmería “despeja muy fuertemente de lo que ha sido acusado el Gobierno: una desaparición forzosa”. Claro se olvida de contar que las camionetas fueron lavadas y pasados varios días inspeccionada por la policía científica.
La ministra que continua a las fuerzas de seguridad señaló que “eso nos abre ventanas a otras hipótesis que nosotros siempre hemos planteado”.
Bullrich está decidida a defender contra viento y marea a la Gendarmería. En horas de la mañana, el gobierno y los medios hegemónicos lanzaron la posibilidad que el gendarme Neri Romero haya “tirado” un piedrazo a uno de los “encapuchados” que cruzaba el rio Chubut durante el operativo de Gendarmería para despejar la ruta 40.
Según se detalló en un parte de prensa del juzgado, fueron analizadas un total de 80 muestras que fueron comparadas con las muestras de referencias obtenidas de los padres -Enrique Aníbal Maldonado y Stella Maris Peloso- y el hermano de Maldonado, Sergio.
No obstante, según se informó, del total de 82 muestras enviadas para cotejar, “queda pendiente el análisis de 2 muestras”, una de ellas encontrada en un camión Mercedes Benz Unimog y la otra en el buzo negro que pertenecería a Maldonado.
El gobierno no quiere reconocer todos los testigos que hay en la causa, lo mismo que el juez, tampoco acepto los estudios que realizo el perito en telecomunicaciones Ariel Garbarz, que confirmó que el celular de Maldonado fue activado el 2 de agosto en Esquel.
Caso Maldonado: por primera vez un gendarme reconoció haber herido a un manifestante