El proyecto del presupuesto nacional 2018 confirmó lo que ya se sabía: el gobierno volverá a subir en 2018 las tarifas de las servicios públicos y esta vez ese incremento también comprenderá al transporte. Por la quita de subsidios al sector, los boletos de tren y colectivo podrían comenzar a valer hasta un 80% más.
En su presentación el proyecto de la ley de leyes ante la Cámara de Diputados, el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, explicó que los subsidios al transporte disminuirán un 6% durante el año próximo. De los $ 104.000 millones destinados a las líneas de trenes y colectivos este año se bajará a $ 98.000 millones. Ese recorte impactará de manera directa en lo que el usuario paga de boleto.
Aunque Dujovne prefiere no dar cifras sobre cuáles serán los incrementos, sí dio una pista que permite hacer una estimación. Dijo que “al menos vamos a tener que compensar la inflación” y recordó que desde abril de 2016 no se tocan los boletos. En los cálculos oficiales eso significa una suba del 50% como mínimo y de hasta 80% máximo, según publicó Clarín.
También habrá menor contribución de dinero público para los servicios públicos, como electricidad. Al referirse a las tarifas de gas y luz que dependen de esa cartera, Dujovne dijo que seguirá “el proceso de revisión semestral de tarifas acordado en audiencias públicas. No está definido el monto pero sí el mecanismo, que va a ser semestral”. Los subsidios energéticos bajarán de $ 136.000 millones en 2017 a casi $ 108.000 en 2018.
“Tenemos que seguir normalizando la estructura tarifaria porque tenemos que converger en cuentas fiscales más sanas, pero creemos que el dinero gastado en subsidios al transporte está bien, porque está destinado a quien más lo necesita”, explicó el funcionario.
Y continuó: “Sin dudas la disminución en subsidios que tiene Transporte es mucho menor a la que tiene Energía, aún partiendo de un nivel en el cual el porcentaje de cobertura del costo de transporte pagado por los usuarios es menor a esta altura que la energía”.