El ministro de Economía bonaerense, Hernán Lacunza, ya avisó que buscará un “pacto fiscal” con los intendentes de la provincia para que bajen las tasas, en consonancia con la reducción de impuestos que asegura que impulsará en la ley fiscal 2018 que enviará a la Legislatura apenas pasen las elecciones. Los intendentes, tanto oficialistas como opositores, ya pusieron el grito en el cielo.
“El año próximo empezaremos a bajar la presión impositiva, sobre todo en Ingresos Brutos y Sellos, que son los impuestos más perversos porque distorsionan la actividad”, adelantó Lacunza en una charla sobre “Economías regionales hacia el 2018” . Y completó: “Tenemos en agenda para el año que viene trabajar en un pacto fiscal con los municipios. Queremos corregir la heterogeneidad con un acuerdo que nos permita homogeneizar y bajar las tasas”.
El funcionario basó su pedido en la disparidad que existe entre las tasas que cobran unos municipios y otros. “A veces cruzando la calle sobre todo en el Gran Buenos Aires las tasas municipales son el doble o la mitad que en la vereda de enfrente, un absurdo. Esta heterogeneidad la queremos corregir en un pacto fiscal”, dijo.
Un informe realizado por la revista La Tecla recogió opiniones de los 135 intendentes de la provincia. La mayoría dijo que no está de acuerdo con la medida porque cree que desfinanciaría las cuentas municipales. Los que aceptan dicen que lo harían siempre y cuando la provincia compense la plata que perderán en la recaudación.
“No podemos bajar las tasas. De enero a ahora se nos cayó 30 puntos la recaudación”, sostuvo el jefe comunal interino de Florencio Varela, Andrés Watson (FpV), y consideró que la propuesta de la Provincia “parece un chiste”.
El jefe comunal de Ensenada, Mario Secco (FpV), consideró que es “lamentable” que la Provincia les pida bajar las tasas cuando “ni siquiera nos mandan plata para los patrulleros, las tizas de las escuelas ni las curitas del hospital”. Además, aseguró que el cobro de tasas cayó un 30 por ciento este año.
Desde la intendencia de Berisso, que conduce el oficialista Jorge Nedela, se aclaró que las tasas que se cobran en ese distrito son “las más bajas” de la región y deslizaron que por eso planeaban un incremento en 2018.
Desde General Rodríguez, municipio comandado por el oficialista Darío Kubar, consideraron que “es una utopía, tenemos una cobrabilidad del 20 por ciento en Alumrado, Barrido y Limpieza” y se quejaron porque la coparticipación es “mala”.
En Pilar, distrito que gobierno Nicolás Ducoté (Cambiemos), aseguraron que la única forma de bajar las tasas es que la Provincia los compense económicamente con mayor coparticipación o que se haga cargo de servicios municipales.
Por último, desde el municipio de Moreno, que dirige Walter Festa (FpV) sostuvieron que “entre la recaudación y la coparticipación no llegamos a pagar los sueldos” y que “pronunciarnos sobre una modificación que nos produzca perder dinero,nos parece una tortura china. La verdad que nos están asfixiando”.
1 comentario
ESTOS ESTAN MAS OCUPADOS DE LOS ANIMALES QUE DE SUS HERMANOS!!