Miles de personas nucleadas en distintas organizaciones sociales, políticas y de DDHH se movilizaron a la Plaza de Mayo “contra la persecución a opositores” y por la “libertad de todos los presos políticos” luego de que el juez federal Claudio Bonadio pidiera el desafuero de Cristina Kirchner y ordenara detener a los dirigentes Luis D’Elía, Carlos Zanninni, Héctor Timerman y Fernando Esteche.
El encuentro comenzó a las 19 horas y coincidió con la tradicional ronda de las Madres de Plaza de Mayo, organismo que además desarrolló la llamada “Marcha de la Resistencia” bajo la consigna “La falta de trabajo es un crimen que alguien tiene que pagar”. Con cánticos contra Bonadio y el Gobierno, la marcha llegó a las puertas de la Casa Rosada: allí confluyeron militantes de Unidos y Organizados, Unidad Ciudadana, La Cámpora, Movimiento Evita, Kolina, Frente Milagro Sala, Patria Grande, CTEP, CTA de los Trabajadores y ATE Capital, entre otras.
También se pudo ver a algunos dirigentes kirchneristas como los diputados electos Agustín Rossi y Fernando Espinoza y el ex canciller Jorge Taiana. Además, hubo presencia de partidos de izquierda como el MST y el PTS y asistieron dirigentes del FIT (Frente de Izquierda), como Myriam Bergman, y del Nuevo Mas, como Manuela Castañeira, quienes cuestionaron duramente la decisión de Bonadio de avanzar con detenciones preventivas de dirigentes políticos.
Durante la marcha, el diputado de Unidad Ciudadana, Leopoldo Moreau calificó el accionar de Bonadio como una “persecución” y tildó al juez de “sin vergüenza”. “Hay un sistema mafioso de extorsiones múltiples y el Gobierno es el que mueve todas estas piezas. Por eso tienen una llamada mesa judicial conformada por Garavano, Angelici y Marcos Peña que se reúne cada 15 días para saber a qué juez se le puede cortar la cabeza”, deslizó Moreau.
En este sentido, aseguró que el Gobierno pretende “tener de rehén a Cristina en el Senado”. “Si hay alguien a la que no van a poder someter es a Cristina de Kirchner. Si creen que con esta medida la van a callar, están muy equivocados”, dijo. Y continuó: “Los que fomentan la violencia política están en el Gobierno. Macri es el peligro para la sociedad argentina, no la oposición”.
En la misma sintonía se expresó el diputado Espinoza quien afirmó: “Parecería que estamos viviendo en una Argentina de locos. Esto es algo que nunca pasó en el país. Después de casi dos años de tener una causa como esta, a tres días de que Cristina asuma como senadora, un juez le dicta la prisión preventiva y el pedido de desafuero. Esto no tiene razón de ser, quieren tapar el sol con las manos y cambiar la agenda del argentino de a pie”.
El ex intendente de La Matanza dijo que las reformas planteadas por el oficialismo generarán “desempleo” y “bajas en los salarios”. “Quieren tapar la realidad para votar estas leyes antes de fin de año. La mayoría del pueblo argentino se despertó con la decisión de un juez que quiere tapar el desastre económico al que nos quieren llevar”, analizó.
Repudio internacional a Bonadio
La decisión de Bonadio también tuvo repercusiones a nivel internacional. El ex presidente ecuatoriano, Rafael Correa, y el Partido de los Trabajadores de Brasil alertaron que este es otro capítulo más de la “judicialización de la política”, al enmarcar la situación local en relación a otros casos regionales, como la destitución de la presidenta brasilera depuesta Dilma Rousseff y las causas abiertas contra el líder del partido y ex presidente Lula Da Silva.
Desde el PT advirtieron que la estrategia llevada adelante por Bonadio “provoca la corrosión del Estado de Derecho y la violación de los principios fundamentales de la democracia y de la soberanía nacional”. “Lo que se ve en curso en Argentina es la misma estrategia usada por la derecha en otros países de América Latina”, advirtió la bancada del PT en un comunicado en el que expresaron su solidaridad con la actual senadora. Aseguraron que el objetivo final es “asesinar reputaciones para alejar de la disputa presidencial de 2019 los principales nombres de la oposición y las fuerzas de izquierda y progresistas en general ” de la región.