El juez a cargo del desalojo que terminó con la muerte del joven mapuche Rafael Nahuel, Gustavo Villanueva, ordenó realizar una inspección ocular en el lugar donde este fue asesinado y el resultado dejó al descubierto las mentiras del discurso oficial del Ministerio de Seguridad y de Patricia Bullrich.
Tras varias horas de busca de pruebas, los peritos determinaron que no se encontraron “ramas rotas por disparos”, y sí por el contario, cartuchos provenientes de ametralladoras de 9 milímetros, las mismas que utiliza la Prefectura.
Además, como otro dato importante, también se terminó de confirmar que el joven mapuche recibió un disparo por la espalda a más de mil metros, lo que también volvió a desestimar al discurso esgrimido por la ministra Patricia Bullrich, que habló de “enfrentamiento” a por lo menos 300 metros entre los mapuches y el grupo Albatros de Prefectura.
Según los peritos, Rafael Nahuel -22 años- fue asesinado fríamente por la espalda a por lo menos 1.500 metros, lo que sugiere que fue atacado desde una distancia considerable para descartar enfrentamiento y por el otro lado, para habilitar la idea de que Prefectura realizó una “cacería” en la comunidad mapuche de Villa Mascardi, Bariloche.
La ministra había defendido a las fuerzas de seguridad que participaron en la represión que terminó con la vida de Rafael Nahuel, de la misma forma que lo había hecho con la Gendarmería a días de la desaparición de Santiago Maldonado.